Boicotéese también en Navidad
- LO IMPRECISO COMO TENDENCIA. Hola. Les escribo desde un país llamado Navidades. Las Navidades son un término impreciso. Se sabe cuándo empiezan y cuándo acaban por los escaparates de El Corte Inglés. Los municipios sin Corte Inglés es posible que no se enteren y hagan durar las Navidades todo el año. Si eso es así, esos municipios estarán à la page. El mundo se está navideñanizando por segundos. Hay días enteros en los que todo es Navidad, ese sentimiento impreciso.
- EL MARAVILLOSO MUNDO DE LOS SENTIMIENTOS IMPRECISOS. Ahora estoy en un taxi. Por la radio del taxi suenan imprecisiones. El nuevo Estatut aboga por la independencia, no reconoce ni el Tribunal Supremo ni el Consti, los niños catalanes serán obligados a hablar catalán incluso con su amigo imaginario, etcétera. De esas imprecisiones -el mapa comunicativo local en ocasiones es Navidad non-stop- nacen sentimientos imprecisos. Son sentimientos imprecisos bajos, sub-navideños, más mixed emotions que las Navidades ad-hoc. Por lo que no se pueden construir escaparates con ellos, con los que darles principio y final a las sesiones de imprecisión. Como todos los sentimientos difíciles, estos sentimientos lo tienen a huevo, por tanto, para vivir en la Red. Esa locura colectiva.
Algunas páginas de Internet apoyan el boicoteo a lo catalán. En otras puedes boicotear a tu empresa, a tu 'web' o a ti mismo
- DE LA IMPRECISIÓN A LA LOCURA. Y ahora, alehop, estoy en la Red, esa cosa que ha posibilitado a todo el mundo acceder a toda la información sobre Star-Treck. O cualquier otro sentimiento impreciso. Repaso vertebraciones sentimentales imprecisas de ese objeto informativo impreciso denominado Estatut. Son páginas que, por lo general, duran muy poco. Hasta que alguien investiga quién es el autor de esas páginas / esos escaparates. Mi favorita era www.noalestatut.com. No la busquen, que ya no está. Pedían enviar un mensaje con el texto "voto Estatuto no" al 7133. Inmediatamente recibías el texto "Gracias por tu apoyo, di también a tus amigos y familiares que se apunten enviando voto no al 7133. Pásalo". La página se cerró cuando alguien averiguó que la cosa costaba un euro y pico por bigote y mensaje, y financiaba la segunda residencia de un chico listo. La segunda página en mi ranking es www.nacionalismo-no.com. En ocasiones la página existe. En ocasiones no. Como los sentimientos. Está hecha por personajes anónimos. Es, por tanto, otro escaparate sin firma. O con firma imprecisa. No obstante, es la piedra angular sobre la que se ha edificado el boicoteo a los productos catalanes, ese sentimiento impreciso pero a la vez concreto que, como las Navidades, también sale por un pico. No se la pierdan.
- POR EL BOICOTEO HACIA DIOS. En la página se establecen cuatro niveles de boicoteo, matizados por colores. En el amarillo, o nivel canijo de boicoteo, están empresas como Gas Natural. En el rojo, o boicoteo king-size, están absolutamente todas las empresas catalanas y vascas. La web ofrece productos alternativos. Un dato inquietante: el producto Paladín a la taza, tan emblemático, por lo visto, del New Estatut, carece de sustituto. Nota: el Barça es boicoteable grado color marrón. La web se complementa con un análisis en profundidad del New Estatut, tan repleto de imprecisiones que sus autores no hubieran superado la prueba de admisión ni siquiera para la Academia Axe. En lo que es una metáfora, la web ofrece una lista de empresas catalanas libres de culpa y susceptibles de no ser boicotedas. La lista, empero, está en blanco.
- LA LOCURA. Y ahora estoy al teléfono. Hablo con Emili Junsalba. "Dentro del absurdo, con todo eso del boicoteo lo que más me indignó es que se pudiera boicotear a La Caixa y no a mi empresa, que está en mi pueblo, Les Borges Blanques. Así que hice algo para remediarlo". Emili, con un grupo de amigotes de Les Borges Blanques, es el creador de www.boicatejam.org, quizá la mejor reflexión en Internet sobre la locura que les explicaba. La página, muy divertida, invita al visitante a boicotearse. En la página uno puede boicotear a su empresa, a su web o a sí mismo. También ofrece un número de teléfono. Llamas y, en cuestión de minutos, te devuelven la llamada para comunicarte que acabas de ser boicoteado. Por el mismo precio, la web ofrece servicios a sus usuarios. Como el de la Biblioteca Bàsica, con todos los pedeefes proto-navideños que circulan por Internet invitando al boicoteo. Entre ellos mi favorito, en el que los huevos Kinder o el caldo de gallina son uno de los productos que boicotear por su contrastada tendencia al cantonalismo.
- EL HUMOR COMO OBJETO DE ALTA PRECISIÓN. "La página es un éxito. La visita y se autoboicotea gente de toda España. Lo ve como algo para romper con toda esta crispación". "Nuestra página es una herramienta para demostrar que contra los ataques más básicos y primarios [los sentimientos, precisamente imprecisos] siempre se puede responder con el humor". A la Navidad, en fin, le quitas la imprecisión y sólo queda el caganer.
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