Decomisadas 15 toneladas de hachís ocultas en una nave industrial de Arganda del Rey

La policía madrileña ha decomisado un alijo de unas 15 toneladas de hachís en una nave industrial de Arganda del Rey, a la vez que ha detenido a 10 individuos supuestamente relacionados con esta operación de narcotráfico. Un alto mando policial resaltó la importancia de esta redada: "Es insólito interceptar un cargamento tan grande en tierra y mucho más aún en el interior de la Península. En el mar o en la costa andaluza es relativamente frecuente aprehender toneladas de hachís, pero en Madrid es la primera vez que cogemos tanta mercancía en un solo golpe".

La actuación policial, realizada por agentes antidroga de la Brigada de Policía Judicial de Madrid, se ha saldado por el momento con la incautación de una cantidad de hachís que fuentes de la investigación estiman en 15 toneladas. No obstante, la policía solamente tenía pesadas hasta ayer por la tarde alrededor de cuatro toneladas, ya que el resto de la droga estaba aún en contenedores.

La mercancía estaba almacenada desde hacía unos 10 días en una nave de la calle de Cabo Finisterre, en el polígono industrial La Poveda, de Arganda del Rey, alquilada por un español. El almacén, en cuyo exterior no figura ningún rótulo, había sido reformado hace poco para ampliar la puerta de entrada y permitir así el acceso del tráiler en el que iba a llegar la mercancía, según comentaron ayer algunos empleados de otras industrias cercanas.

La droga fue transportada por un camión de una empresa radicada en Tánger (Marruecos) a través de Algeciras (Cádiz), según fuentes de la investigación. El vehículo pasó sin ningún tropiezo todos los controles aduaneros, pese a que en su interior ocultaba toneladas de hachís procedentes supuestamente de algún punto de Marruecos. Oficialmente, la carga del vehículo era tomates, pero tras las hortalizas iban camuflados varios palés de contenedores sellados con silicona.

La policía madrileña irrumpió ayer en la nave cuando el camión salía de la misma tras haber depositado la mercancía. Los ocho hombres que había en el interior ofrecieron resistencia, y algunos de ellos forcejearon con los agentes (uno de ellos sufrió una herida que precisó varios puntos de sutura). Aparte de los ocho detenidos en la nave industrial, los investigadores han detenido a otras dos personas en lugares que no han sido precisados. En total, hasta anoche habían sido arrestados nueve marroquíes y un español. Otros implicados han logrado escapar.

Ayer por la tarde se desplazaron a Arganda del Rey el comisario general de Policía Judicial, Juan Antonio González, el jefe superior de Policía de Madrid, Enrique Barón, y el jefe de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Madrid, José Manuel Calleja, para supervisar la operación junto con otras autoridades judiciales.

Fuentes policiales han indicado que tras el alijo hay una organización con ramificaciones en el extranjero, posiblemente con delincuentes marroquíes. Un hombre de esta nacionalidad es el jefe de la red de introducción de la mercancía en España, mientras que un español es el cabecilla de la red de distribución.

Los mismos medios suponen que buena parte del alijo decomisado iba a ser distribuido en la Comunidad de Madrid, aunque otra parte sería repartida desde Arganda del Rey a otras regiones, entre ellas varias provincias de la cornisa cantábrica.

"El alijo de hachís interceptado en Arganda podría constituir el mayor de la historia en Madrid", según la Dirección General de la Policía. En noviembre de 2004, la Guardia Civil se incautó de seis toneladas de hachís en un taller mecánico del polígono Salto del Caballo, en Humanes.

El método de introducción de la droga -oculta entre una carga de tomates- recuerda al descubierto en abril de 2004, cuando agentes de la Guardia Civil y efectivos de la Agencia Tributaria decomisaron en Algeciras ocho toneladas de hachís ocultas entre varias filas de tomates en un camión que acababa de llegar de Marruecos.