20.085

Las bolitas del bombo decidieron llevar la suerte a Cataluña, muchos de cuyos habitantes celebraron con cava el aluvión de millones. El gordo, el 20.085, vendido íntegramente en Vic (Barcelona), ha dejado en esta localidad casi 510 millones de euros; el tercer premio, el 07.494, dotado con 81,5 millones, eligió marcharse a la cercana Mataró (Barcelona). Y un número indeterminado de participaciones de seis de los ocho quintos premios han dejado también su lluvia millonaria en Cataluña, desde Molins de Rei, en Barcelona a Sort, pasando por Amposta, en Tarragona, entre otros. Cataluña, que jugaba 429,4 millones de euros a la lotería, ha visto recompensada su confianza en el azar, ya que los números le han devuelto 609,5 millones.

El segundo premio, con 170 millones de euros, fue a Valencia. La falla Marqués de Montoral-Conde de Torrefiel y un bar de la capital valenciana fueron los lugares desde donde se distribuyeron las participaciones.

Los cuartos premios recayeron en Málaga y en Barakaldo (Vizcaya). Y los ocho quintos se repartieron, además de por Cataluña, por casi todo el mapa español: A Coruña, Asturias, Valladolid, Huelva, Badajoz, Cádiz, Toledo, Madrid (Alcorcón, Móstoles y Torrejón de Ardoz).

El gordo fue un premio a la fidelidad: la administración número 3 de Vic llevaba vendiendo el número agraciado desde hace 22 años. Y por fin salió. Miquel Colina, el regente de esta administración, calculaba que entre lo vendido en la ventanilla y lo distribuido por los bares y tiendas de la zona, más de 5.000 personas llevan participaciones de este 20.085. Un número feo que, sin embargo, ayer resultó muy bonito.