Ética y estética de un mecenas

"En mi colección de arte contemporáneo, que mi esposa Carmen García Merchante y yo donamos a la Universitat de València en 1999, siempre ha primado la unión entre la estética y la ética, la forma y el contenido, sea o no explícito". Lo dijo ayer por escrito Jesús Martínez Guerricabeitia en la presentación de la octava bienal que lleva el nombre del empresario de izquierdas y mecenas.

No hay acto al que asista el coleccionista que no reciba palabras de elogios debido a su generosidad. Se trata, de hecho, de un comportamiento excepcional en el panorama artístico valenciano que, probablemente, tan sólo se puede comparar al de otro coleccionista, Pere Maria Orts, que ha donado su notable obra a la Generalitat.

Ayer, el rector de la Universitat, Francisco Tomás, y la concejal de Cultura del Ayuntamiento de Valencia, María José Alcón, reiteraron esas palabras antes de presentar la bienal, que se exhibe hasta el 15 de enero en el municipal Museo de la Ciudad de Valencia. Organizada por el Patronato Martínez Guerricabeitia, en colaboración con las instituciones señaladas y con la ayuda del Santander Central Hispano, la selección lleva por título este año Robatoris, en alusión al robo de obras de arte y de la apropiación de ideas dentro del mundo del arte.

La bienal nutre de obras la colección de la Universitat a través de una primera selección de las mismas y la posterior compra de una, dos o tres piezas. Cinco especialistas en arte contemporáneo y otros tantos galeristas eligen a dos creadores cada uno. Se conforma, así pues, una selección de 20 obras que se exponen al público ofreciendo una síntesis del arte español emergente.

De modo que se exhiben las obras de Antonio González, José Manuel Ballester (elegidos por Enrique Juncosa); Victoria Garrido, Jesús Galdón (por Ricard Mas); José Ramón Amondarain, Isidro Blasco (por Juan Bautista Peiró), Jon Mikel Euba, Pego Salazar (por Agustín Pérez), Joxerra Melguizo, Josechu Dávila (por Elena Vozmediano), Santi Moix, Miquel Mont (por la Galería dels Àngels); Dionisio González, Bernardi Roig (por Galería Max Estrella); Paco García, Lidó Rico (por Galería Fernando Latorre); Angel Mateo Charris, Chema Madoz (por Galería My name's Lolita Art), Pipo Hernández y Juan Gopar (por Galería Manuel Ojeda).

El comisario de la muestra es el nuevo responsable de las actividades del patronato Martínez Guerricabeitia, Vicent Sanz. Este químico y coleccionistas, miembro del patronato, sustituye a Ricard Huerta, que dimitió del cargo hace unos meses, posibilitando lo que el rector calificó como "un proceso natural de renovación".

Sanz explicó que la exposición es "una propuesta amplia sobre la cual podemos articular las diferentes voces de los artistas representados en torno a temas como la apropiación por el artista de ideas ajenas, para transgredirlas o reinterpretarlas, hasta el robo o la destrucción directa de obras de arte".

Martínez Guerricabeitia abundó en su idea de arte a través de un escrito que leyó el rector por una afección del coleccionista: "Debe ser comprometido, ayudar a conseguir un mundo mejor, levantar ampollas y despertar la polémica sobre temas silenciados o censurados. Por desgracia, opino que el arte poco ha cambiado este mundo, donde prima el egoísmo y el interés particular".