El limbo jurídico y el dilema legislativo
El popular Rafael Maluenda achacó a la "falta de coordinación, interpretación o entendimiento" el rechazo de la Mesa de las Cortes a tramitar una "corrección de errores" del Consell que tenía como objetivo modificar una ley en tramitación para ampliar la exención a los promotores de ceder suelo. Indicios para pensar así, los hay.
Ninguno de los miembros del Consell, con excepción del presidente Francisco Camps, ha defendido ni en público ni en privado la decisión del titular de Territorio, Rafael Blasco, de recurrir a un artificio legislativo para solucionar un error de origen. Un artificio que consiste en modificar, mediante una fe de erratas, la ley de Acompañamiento de los Presupuestos de la Generalitat para 2006 ya en la recta final de tramitación y que incluye en su articulado una modificación de la LOT. Todo un juego de cajas chinas, que esconden en su interior nuevas ventajas para los promotores, y que la Mesa de las Cortes se vio ayer incapaz de tramitar para no verse envuelta en un complicado conflicto.
El propio consejero de Economía, Gerardo Camps, que firma la "corrección de errores", se negó el pasado martes a opinar sobre la polémica fe de erratas y remitió a su compañero Blasco.
El portavoz del Consell, Esteban González Pons, explicó ayer que Blasco había informado en la reunión del Gobierno valenciano de la polémica y apeló a la "cortesía de la oposición para aceptar una corrección de errores cuando es evidente que son involuntarios". Simultáneamente, Maluenda reconocía casi al mismo tiempo en sede parlamentaria que se trataba de una "modificación sustancial". Aunque ambos daban por hecho que la fórmula de la "corrección de errores" no funcionaría y sería finalmente rechazada. "El limbo jurídico todavía existe", dijo el portavoz del Consell ironizando sobre un acuerdo que quedará en agua de borrajas.
El lío legislativo, sin embargo, no ha acabado para el PP, que ahora tiene que decidir si mantiene los artículos de la Ley de Acompañamiento que hacen referencia a la LOT y que Blasco insiste en modificar. Si el PP vota a favor modificará aspectos de la LOT, que Territorio piensa volver a enmendar en cuestión de meses. Si vota en contra, el PP estará rechazando parte de un proyecto de ley del Consell al que no se ha presentado enmienda alguna. Lo que tampoco ahorraría a Blasco la realización de una nueva modificación legislativa. Y todo ello sin perjuicio de que alguno de los afectados por la LOT no opte por alegar indefensión jurídica ante el baile de modificaciones legislativas que, supuestamente, se avecina.
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