Dos detenidos huyen del centro de internamiento de extranjeros

El centro de internamiento de extranjeros (CIE) ha vivido esta semana una nueva fuga de detenidos. Dos inmigrantes han conseguido huir tras romper una ventana, según fuentes sindicales. Éste es el tercer incidente de estas características, pese a que fue inaugurado el pasado 28 de junio. Los sindicatos del Cuerpo Nacional de Policía han pedido medidas urgentes en el Consejo de la Policía para evitar más problemas en este establecimiento, que se encuentra en el antiguo hospital penitenciario de Carabanchel.

Los hechos se produjeron la noche del pasado lunes, cuando cinco internos rompieron el pernio de una de las ventanas y lograron salir al exterior del edificio. Los policías que estaban encargados de la vigilancia del centro lograron apresar a tres, pero otros dos huyeron a la carrera, según fuentes sindicales. Se trata de dos extranjeros que estaban pendientes de ser expulsados de España, ya que habían infringido la Ley de Extranjería y carecían de documentación para residir y trabajar en España.

Es la tercera fuga que ocurre en el CIE de Carabanchel, desde su apertura el pasado 28 de junio. Justo el primer día de internamiento de los extranjeros, cinco detenidos lograron fugarse tras romper unas ventanas y saltar una valla. La penúltima fuga conocida se produjo el pasado 13 de octubre, cuando tres inmigrantes lograron serrar los barrotes de las rejas.

El edificio fue iniciado y proyectado en la etapa en la que el PP estaba al frente del Gobierno central. El proyecto redactado por el equipo del entonces secretario de Estado para la Seguridad, Ignacio Astarloa, no previó reforzar las ventanas y dotarlo de mejores medidas de seguridad. Los sindicatos del Cuerpo Nacional de Policía denunciaron a finales del pasado julio "las graves carencias" del CIE. Verjas de ventanas que saltan con un simple empujón, mobiliario no anclado al suelo y falta de agentes para vigilar a los inmigrantes fueron algunos problemas que ven los representantes de los policías, que pidieron una reforma urgente del establecimiento.

Uno de los sindicatos que más críticas plantearon fue el Sindicato Unificado de Policía (SUP), el mayoritario en el cuerpo, que ya denunció los días 13 y 25 de junio que dicho centro "no reunía los mínimos requisitos" para entrar en funcionamiento. El centro de internamiento tiene capacidad para 240 personas, cuatro veces más que el anterior que había en la sede de Moratalaz, en la calle de La Tacona.