Turismo Andaluz presenta a la OMT un nuevo sistema estadístico para evaluar la actividad

Un equipo de especialistas de la empresa pública Turismo Andaluz ha diseñado un nuevo sistema de indicadores que permite evaluar la incidencia de la actividad turística sobre el medio ambiente, el territorio y la población local y que tiene como último objetivo suministrar información suficiente para diseñar políticas y medidas de planificación más eficaces. El equipo de SAETA (Sistema de Análisis y Estadística del Turismo en Andalucía) ha presentado este nuevo modelo en un congreso convocado por la Organización Mundial de Turismo (OMT) en Iguazú en el que sólo se han invitado para presentar sus proyectos a dos representaciones de gobiernos regionales, la andaluza y una de Escocia.

Hasta ahora, los indicadores de las conocidas como cuentas satélites del turismo se limitan a analizar el número de turistas que llegan a una determinada zona, su perfil socioeconómico y ciertas pautas de comportamiento durante sus vacaciones como el gasto de bolsillo que realizan. Estos indicadores suministran mucha información sobre la demanda, pero apenas analizan la oferta más allá del número de plazas de alojamiento existente y su grado de ocupación. El equipo de SAETA justifica su proyecto de nuevos indicadores en la necesidad de información para afrontar un asunto esencial en las zonas de mayor desarrollo turístico: la viabilidad de la actividad a medio y largo plazo.

En Andalucía por ejemplo existe un alto grado de consenso en el sector turístico en que hay que alejarse de un modelo basado esencialmente en la cantidad de visitantes que llegan y que el camino a seguir no puede ser el desarrollo ilimitado. Para trazar ese nuevo modelo resulta necesario conocer mejor la rentabilidad económica y social el turismo, o sus efectos sobre el medio ambiente y el territorio.

La actividad turística en Andalucía se concentra en la zona sometida a mayor presión, la costa. Los municipios del litoral apenas representan el 9% de la superficie total de la comunidad autónoma, pero en esa franja se concentra el 34% e la población y el 70% de la oferta de alojamientos. El 75% de las pernoctaciones en establecimientos hoteleros se produce en el litoral. La costa es así el principal activo turístico de Andalucía, y a la vez el que ofrece mayores riesgos debido a su intensiva utilización.

El nuevo sistema de indicadores diseñado por SAETA contiene dos bloques que miden la sostenibilidad y la calidad integral. En el primero por ejemplo se introduce el indicador de presión humana, que mide la densidad de población incluyendo la presencia de turistas con una metodología de cálculo que permite conocer el espacio de litoral que corresponde a cada persona, o el de población turística asistida, que mide la proporción entre visitantes y residentes. Otras variables contempladas son el consumo de agua, tanto de turistas como de residentes, las emisiones de gases contaminantes, la generación de residuos o la cuantificación del suelo no ocupado.

Para el ensayo de aplicación práctica de este sistema, SAETA ha trabajado en el municipio de Benalmádena, donde ha estimado, entre otras variables, que en el año 2004 a cada persona correspondía una media de 0,88 metros cuadrados de playa, que el 49,6% de la población eran turistas, que de cada 100 empleos en la ciudad, 22 correspondían al sector turístico, o que el consumo diario de agua por persona fue de 438 litros.

Este ensayo ha relevado otros datos curisoso como que el 24% de los turistas no ha utilizado las playas, o que aunque el 74% de los establecimientos hoteleros disponen de Internet, en menor medida (42%) usan el comercio electrónico para la comercialización, y más bajo aún (32%) es el uso de la red en la contratación de reservas.