"Respetaremos el resultado que salga del referéndum"
"Los cambios que pedimos darán esperanza a la gente de que vive en un país democrático y en un Estado de derecho", aseguraba a este diario Samir Abdalá, jefe de la delegación árabe suní en el comité redactor de la Constitución, horas antes de que chiíes y kurdos aceptaran algunas enmiendas en un intento por ganarse el apoyo de esa comunidad.
Abdalá, que se encontraba en Ammán participando en un seminario, se mostró convencido de que sólo incluyendo esas exigencias de los suníes disminuirá la violencia política que mantiene a Irak rehén del terror. Entre las peticiones, el representante suní subrayó que se garantice la unidad del país y que la futura forma de gobierno se adopte por una mayoría de dos tercios en el próximo Parlamento.
"El gesto permitirá la participación de iraquíes que hasta ahora tenían una visión negativa del proceso político", declaró. Abdalá temía que de no ver sus preocupaciones tenidas en consideración, los árabes suníes sentirían que "no tienen nada que ganar con el proceso político, lo que daría más argumentos a los terroristas". Algunos observadores estiman, no obstante, que la violencia ha adquirido su propia dinámica y que los arreglos políticos ya no bastan para frenarla.
El acuerdo de última hora ha conseguido el respaldo a la Constitución del Partido Islámico de Irak, la principal formación política suní, que tiene una ideología próxima a los Hermanos Musulmanes y al que pertenece el propio Abdalá. Sin embargo, no ha convencido a otros grupos suníes cuyos dirigentes siguen defendiendo el no, o incluso el boicoteo al referéndum, algo que les aproxima a las posturas de los insurgentes.
"Creemos firmemente en la voluntad de la gente y respetaremos el resultado que salga del referéndum", afirmaba no obstante Abdalá que, como muchos dirigentes suníes, ha reconsiderado el boicoteo por el que optaron en las pasadas elecciones, y ahora defiende la participación no sólo en el escrutinio del próximo sábado, sino también en las elecciones de diciembre.
"Estamos trabajando en la formación de una coalición para tratar de unir a las fuerzas suníes e intentar cambiar el marco legal desde dentro", manifestó Abdalá en un fenomenal giro político que constituye la única esperanza de que la comunidad árabe suní esté adecuadamente representada en el próximo Parlamento.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.