El secretario de las cumbres iberoamericanas defiende la globalización con igualdad
El foro parlamentario se reúne en Salamanca
Enrique Iglesias, flamante secretario general de las cumbres iberoamericanas, afirmó ayer, con ocasión de su primera intervención pública, que el sistema regional sirve para "luchar en el mundo por que la globalización se traduzca en una mayor igualdad de oportunidades".
El hasta ayer presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) dijo estas palabras durante la clausura, presidida por la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, del I Foro Parlamentario Iberoamericano, que ha iniciado las reuniones preparatorias de la cumbre que comienza el día 14 en Salamanca.
El secretario general felicitó al centenar de parlamentarios reunidos por el carácter concreto de las conclusiones que remitirán a los líderes, en relación con los cuatro apartados o mesas que estructurarán la cumbre.
En materia de democracia, el foro parlamentario propone fortalecer los partidos políticos, luchar contra la corrupción, desarrollar una prensa libre e incorporar a la mujer en la política.
La mesa sobre economía y desarrollo pide que se favorezca la inversión extranjera, con mayor seguridad jurídica, destaca la importancia de la integración regional y propone que la comunidad iberoamericana tenga una voz única para Europa.
Los parlamentarios recogen la propuesta hecha por España en el marco de la Alianza contra el Hambre de reducir el coste de las transferencias de las remesas de emigrantes, y se hacen eco del plan, también español, de canjear deuda externa por programas de educación.
El foro destaca, por último, que es preciso incrementar el gasto e inversión en educación y sanidad para corregir las grandes desigualdades sociales que subsisten en el subcontinente americano.
La mesa sobre cooperación para el desarrollo insistió en la necesidad de resolver los retos sociales que plantea la inmigración, y añadió un acento fundamental sobre "el empoderamiento" económico, político y social de las mujeres, en la erradicación de la violencia sexista y en la lucha contra las mafias que trafican con "mujeres, niñas, niños y adolescentes con fines de explotación sexual".
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