Guillermo Castelló, magistrado

Guillermo Castelló Guilabert, presidente de la Sección Tercera de la Audiencia de Barcelona, falleció el pasado lunes 26 de septiembre en un accidente de tráfico en la localidad de El Perelló (Tarragona).

Nacido hace 53 años en Alicante, ciudad en la que ayer fue enterrado, Castelló ingresó en la carrera judicial en 1977 y, en contra de lo habitual, cambió muy poco de destino. El primero fue en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Siero (Asturias), en 1981 pasó al Juzgado de Primera Instancia de Instrucción número 3 de Sabadell (Barcelona) y desde el año 1993 estaba destinado en la Sección Tercera de la Audiencia de Barcelona.

El último juicio con relevancia pública que presidió fue el celebrado contra los presos huido Manuel Brito y Francisco Javier Picatoste, que acabaron condenados por asesinato y violación. En esa vista pública Castelló demostró una enorme paciencia y consideración ante las salidas de tono de los acusados o las preguntas inducidas de algunos abogados.

Hombre afable y siempre accesible, Castelló se caracterizó por una gran discreción. No pertenecía a ninguna asociación judicial, pero sus planteamientos no eran los de un juez conservador.

Era, por encima de todo, una buena persona. Los funcionarios judiciales que trabajan con él se desplazaron el miércoles de Barcelona a Alicante para asistir al sepelio y se suspendieron los juicios previstos.