"El 'míster' sabe lo que hace y tiene nuestra confianza"

El retorno de Ronaldinho al equipo no pudo ser más brillante. Marcó tres goles, tuvo el detalle de regalarle la camiseta al entrenador del Udinese, Serse Cosmi, y nada más concluir desvaneció cualquier sombra sobre su ausencia en la convocatoria de Frank Rijkaard de la expedición azulgrana que afrontó el último partido de Liga en el campo del Betis. "El míster sabe lo que hace y tiene nuestra confianza y nuestra comprensión", declaró todavía bañado en sudor el astro brasileño. De esta forma ratificó las explicaciones que ofreció Rijkaard el pasado lunes y en las que indicó que ya había hablado con Ronaldinho y Deco antes y después de viajar a Sevilla. El entrenador negó que la exclusión de ambos jugadores para el partido ante el Betis se debiera a posibles problemas en el vestuario.

Ronaldinho se llevó la pelota del partido y explicó por qué: "Mi fuerte no es hacer goles y la tradición es llevarse la pelota, así que lo he aprovechado. Me la he llevado y me la han firmado mis compañeros. El público está siempre apoyándome y le he podido brindar los goles. Ha sido una noche perfecta".

Rijkaard, que para el partido ante el Udinese prescindió de Giuly y Edmilson, fue preguntado sobre las rotaciones. El entrenador holandés explicó: "Sólo puedes convocar a 18 jugadores para cada partido. Tenemos más jugadores que pueden participar. Cuando uno queda fuera se puede decir que se trata de rotaciones, de descanso o de lo que quieras. Pero el caso se dará siempre. Hay que analizar al equipo, a los jugadores, en qué momento están, en qué momento estamos y qué partidos son más importantes, los de Champions, por ejemplo".

El menos contento fue Víctor Valdés. En el punto de mira tras los últimos goles encajados ante el Valencia y el Udinese, admitió que se siente incómodo por los silbidos que le dedicaron algunos aficionados. El portero explicó: "Respeto y entiendo a los aficionados. No tengo nada que decir, pero sí, es incómodo que te silben".

Puyol reclamó apoyo para el portero y para todos los jugadores azulgrana: "Siempre he dicho que tienen que apoyar. Víctor está en un gran momento. No entiendo que le silben. Después también le han aplaudido y es lo que quiero".

Messi jugó anoche su primer partido con pasaporte español. Volvía al Camp Nou, que no pisaba desde el Gamper, la noche que el Juventus no pudo pararle. En la fila 11 de la boca 103 de la primera gradería del Camp Nou, su padre, Jorge, presenció nervioso el partido acompañado de Rodrigo, su hijo mayor. Y disfrutó, orgulloso, de todo lo bueno que hizo su otro hijo, aunque reconoció: "Ha estado desenvuelto, pero se ha ahogado un poco, demasiado".