Cierre en máximos anuales
Las operaciones corporativas caldean el ambiente en la Bolsa
El mercado de valores español ha recuperado la orientación alcista y termina la semana con un nuevo máximo anual gracias al interés de las operaciones corporativas y al descenso del precio del petróleo. El Ibex 35 cierra en 10.532,10 puntos con una subida del 0,43% en la semana.
El mercado de renta variable ha llamado de nuevo la atención de los inversores, poniendo como principal argumento las operaciones corporativas, tanto las que están en marcha como aquellas que, según la imaginación de cada uno, pueden producirse a corto plazo.
El Ibex 35 termina la semana con una subida del 0,43% y en 10.532,10 puntos, nuevo máximo anual. La Bolsa española recupera así la tendencia de la semana anterior que se vio truncada el pasado martes, cuando la propia altura de las cotizaciones y un discreto repunte en el precio del petróleo impusieron cierta prudencia.
La OPA lanzada por Gas Natural sobre Endesa ha enocntrado un trasfondo político ideal para enconar los ánimos y amenaza con acabar en los tribunales ordinarios, algo que en la bolsa no termina de comprenderse bien, ya que la lógica del mercado parece desestimarla de antemano. La ecuación de canje propuesta por Gas Natural, y que no piensan modificar a no ser a la baja en el supuesto de que Endesa reparta un dividendo con cargo a parte de los beneficios obtenidos por la venta de su participación en Auna, se situaba la cierre del pasado viernes en 20,87 euros, cuando la cotización de Endesa estaba a 21,24 euros.
Para los habituales del mercado, el precio total ofrecido por Endesa es ridículo, pues hay que restarle lo que se pretenda sacar con la venta de activos, hoy propiedad de los accionistas, y "la caja" generada con la venta de Auna, con la que Gas Natural también parecía contar. La OPA no cuenta con enemigos entre los habituales del mercado, pero la mayoría entiende que el precio ofrecido es demasiado bajo, dadas las circunstancias.
Aprovechando el buen momento de las operaciones corporativas la imaginación se ha disparado y el sector bancario se ha colocado en el punto de mira. Los bancos nacionales de tamaño medio han comenzado a dar juego a la inversión a corto, al tiempo que se mira con atención al BBVA, sobre todo después de que los holandeses de ABN-Amro hayan renido éxito en su compra del banco italiano Antonveneta.
Los indicadores han corroborado la irregularidad de la actual coyuntura económica, con los primeros datos que recogen el impacto del huracán Katrina y del encarecimiento del precio del petróleo sobre la economía estadounidense. En Europa todavía no hay datos de aquellos días en los que el petróleo casi alcanzó los 69 dólares en el mercado de Londres, pero la Comunidad Europea ya ha anunciado que recortará su previsión de crecimiento para este año.
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