Tercer máximo

El mercado de valores español consiguió ayer su tercer máximo anual consecutivo, esta vez con efecto psicológico añadido, pues el Ibex 35 superó el nivel de los 10.400 puntos. La subida de esta sesión fue del 0,34% y el índice se situó finalmente en 10.408,00 puntos.

Para algunos observadores ha sido la inercia de las jornadas anteriores la que ha permitido este nuevo avance, ya que las eléctricas empiezan a frenar su tendencia alcista ante la acumulación de opiniones sobre el porvenir de la OPA de Gas Natural sobre Endesa. Con los precios de ayer de las acciones de ambas sociedades, el pago ofrecido por Gas Natural se reduce a 20,87 euros por acción, sólo 27 céntimos más que la cotización de Endesa, lo que plantea muchas incógnitas sobre el futuro de la operación.

Las agencias de calificación se sumaron a la controversia al anunciar cambios en sus valoraciones de Endesa, la mayoría a la baja, lo que contribuyó a aumentar el desconcierto entre los accionistas, ya bastante confusos cuando se les anunció que una parte del pago de sus acciones se hará con la venta de unos activos que hoy les pertenecen.

El volumen negociado en el Mercado Continuo descendió hasta los 2.966,88 millones de euros, casi 2.000 millones menos que el día anterior, lo que viene a confirmar la impresión de que es la inercia la que empujó en esta ocasión al mercado español. Las operaciones institucionales apenas sumaron el 10% del total negociado, lo que sigue dejando la iniciativa en manos de la inversión privada.

La sesión estuvo llena de altibajos, provocados tanto por las noticias que iban llegando al mercado, como por las constantes oscilaciones del precio del petróleo, que en el momento del cierre de los mercados europeos mostraba un ligero descenso, tanto en Estados Unidos como en Europa.

El cierre del conjunto de los mercados europeos resultó positivo, aunque en todos ellos se produjo una importante reducción del ritmo, a pesar del buen dato de la producción industrial en Alemania.

En Estados Unidos la Bolsa mantenía un comportamiento casi plano ante las primeras valoraciones del impacto de los daños causados por el huracán sobre el crecimiento económico. La Oficina de Presupuesto del Congreso estimó que el crecimiento se podría frenar hasta un 1% a final de año con una reducción de 400.000 empleos, aunque esperan una mejora en 2006, a medida que la reconstrucción avance.