Rajoy y Fraga buscan un acuerdo para abrir el relevo en el PP gallego

El proceso para suceder a Manuel Fraga como líder del PP gallego se pondrá en marcha de inmediato, una vez que el ex presidente de la Xunta acuerde los criterios y el calendario con Mariano Rajoy, presidente nacional del partido. Rajoy y Fraga discutirán los detalles en una entrevista que probablemente se celebrará mañana mismo en Perbes (A Coruña), el lugar de veraneo del fundador del PP, o, como muy tarde, el próximo lunes. Según fuentes del PP gallego, Rajoy expondrá a Fraga su idea de que la sucesión se resuelva cuanto antes en un congreso regional extraordinario, que se celebraría entre diciembre y febrero.

Los dirigentes del PP gallego, empezando por el propio Fraga, consideran casi inevitable que se abra una pugna porque habrá más de un candidato para reemplazar al ex presidente, que en noviembre cumple 83 años. Rajoy tratará de buscar el máximo acuerdo posible sobre un aspirante de su agrado, pero un miembro de la ejecutiva del PP gallego muy afín al líder nacional comentó ayer: "Será un congreso abierto y no se impondrá un consenso forzado, porque eso sería lo peor para el partido".

Un puñado de aspirantes

El propósito de la dirección nacional, según las fuentes consultadas, es que el congreso se celebre cuanto antes, preferiblemente en diciembre. El proceso está cargado de peligros para el partido y para Rajoy, implicado en la refriega por su condición de miembro del PP gallego.

Fraga no quiso ponerlo en marcha durante sus 15 años de gobierno para evitar un enfrentamiento sin tapujos entre los dos principales sectores, el afín a Rajoy o del birrete, y el rural y populista, los llamados de la boina. Entre los partidarios de este último algunos dirigentes han empezado a especular otra vez con la posible salida del PP para crear un nuevo partido regionalista, una amenaza que ya planteó el pasado otoño uno de sus miembros más significados, el presidente provincial de Ourense, José Luis Baltar.

Pero las posturas en ambos grupos tampoco son homogéneas. Entre los fieles a la dirección nacional hay uno, el ex vicepresidente de la Xunta Alberto Núñez Feijoo, que ya ha reconocido que se plantea postularse para el liderazgo y que tiene al menos el apoyo de la dirección provincial de A Coruña. Entre los birretes, sin embargo, ha aparecido otro posible candidato, el ex consejero de Pesca Enrique López Veiga, quien aboga por "cambiar el partido de arriba abajo".

En el sector rural cuenta con apoyos Xosé Manuel Barreiro, ex vicepresidente segundo y líder del PP en Lugo, que, además, no está enfrentado a Rajoy. Todo lo contrario que Xosé Cuiña, el más tenaz de los aspirantes y que el pasado martes volvió a recibir el respaldo público de Baltar. Tras las elecciones, Cuiña ha tratado discretamente de medir sus fuerzas, pero, de momento, no ha dicho si presentará su candidatura, que representaría la opción con un discurso más autonomista y menos digerible para la dirección nacional.