Hoteles, la asignatura pendiente
Globalia es un grupo integrado que cuenta con una línea aérea, una agencia de viajes, una red hotelera... Esta última parece ser el frente empresarial que menos flores ha cosechado.
Pregunta. ¿Se puede decir que el negocio hotelero se le ha resistido?
Respuesta. Ha ido más despacio de lo que pensábamos. Ahora tenemos siete u ocho hoteles. Es un negocio que no ha vivido sus mejores momentos en los últimos cuatro años. Los costes de inversión en inmuebles se han disparado, ha habido un desbordamiento de la oferta hotelera en nuestro país y, para colmo, los turistas extranjeros pernoctan cada vez más en apartamentos. Todo esto ha complicado el proyecto. Pero no hemos desistido. Es nuestra gran asignatura pendiente. Vamos a tener hoteles en Canarias, en Baleares, en la Costa del Sol y en el Caribe. Y no sólo. Estamos desarrollando un proyecto de hoteles urbanos, PepeHoteles, que nos está costando más de lo que pensábamos.
P. ¿Por qué?
R. El proyecto consiste en abrir hoteles en edificios singulares -de los que tenemos ya tres en vista en Madrid- diseñados para jóvenes urbanos, de bajo precio, habituados a reservar por Internet, un modelo parecido al de PepeCar, que abarata los costes. El problema es que la gente parece que se ha vuelto loca. Te piden unos precios imposibles. Y así no salen los números. Pero vamos a seguir adelante con el proyecto.
P. ¿Pero, seguirá apostando por la hotelería de sol y playa o se limitará al nuevo proyecto de hoteles urbanos?
R. Seguiremos con los dos proyectos. El tema de los hoteles de sol y playa pretendo relanzarlo a partir de septiembre. También ahí tenemos ya cosas en marcha.
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