La diferencia está en Madrid

Los atletas podrán ir andando desde la Villa Olímpica al estadio en un paseo de sólo 650 metros. Los espectadores lo harán en transporte público: con la entrada a una instalación se tendrá derecho a billete gratuito. El aeropuerto de Barajas estará a sólo cinco minutos del anillo olímpico. Y otros cinco minutos separarán Ifema, donde se disputarán ocho deportes y se instalará la sala de prensa, del estadio de La Peineta. Madrid cambiará con la disputa de los Juegos Olímpicos, ya que el diseño del proyecto contempla el reequilibrio de la ciudad. Pero el punto más diferenciador será el medio ambiente. Madrid 2012 apuesta por unos Juegos muy exigentes en políticas medioambientales. Greenpeace apoya sus planes, que promueven un uso 100% de energías renovables.

El presupuesto de Madrid es el más bajo de todas las ciudades candidatas: 1.660 millones de euros. El 83% de las instalaciones están hechas. La red de transportes -metro, cercanías y anillo ciclista-, casi acabada. La segunda terminal de Barajas empezará a funcionar en 2006. Y además, la ciudad es la que cuenta con mayor respaldo popular a su proyecto, según una encuesta del Comité Olímpico Internacional (COI). El COI sólo ha puesto una objeción a Madrid, en las plazas hoteleras, pero ha dejado claro que cumple con los requisitos indispensables.

Madrid une a su candidatura elementos diferenciadores, y entre ellos destaca el medio ambiente. La sostenibilidad se nota desde su presupuesto -el más barato-, a la utilización posterior de sus instalaciones -todas tienen su uso garantizado-, a la política de transportes, a los usos de energías no contaminantes. Todos estos compromisos están recogidos en dos documentos: el Manual de Buenas Prácticas Ambientales y la Carta Verde, compromisos a los que se están adhiriendo empresas, asociaciones y colectivos que impulsan unos Juegos no contaminantes.

Las infraestructuras para los Juegos, que se financiarán entre las tres administraciones -Gobierno central, Comunidad y Ayuntamiento-, costarán cerca de 6.470 millones de euros. Pero el beneficio bruto que generarán para Madrid los Juegos será de 12.000 millones. Es decir, habrá unos beneficios netos cercanos a los 6.000 millones para la capital, que subirá hasta los 7.000 en el caso de la Comunidad. La creación de empleo prevista, tanto directo como inducido, es de unos 170.000 puestos.

La estrella es el metro

Madrid presenta un plan de transporte basado en el uso del transporte público. Se asegura un carril exclusivo para la familia olímpica en los cuatro anillos de circunvalación (M-30, M-40, M-45, M-50). La estrella de este apartado es el metro: 226 kilómetros de vía que forman uno de los servicios más modernos del mundo. Está prevista una ampliación hasta el anillo olímpico, con lo que las líneas 5 y 7 podrán transportar a todos los aficionados hasta allí durante los Juegos. Los autobuses y la red de trenes de cercanías garantizan también una movilidad confortable para los usuarios, lo mismo que el tren de alta velocidad (AVE), que enlazará Madrid con todas las sedes y subsedes del proyecto.

El modelo de seguridad de Madrid 2012 se inspira en Barcelona 92. A instancias del Gobierno español se creará una comisión superior de seguridad olímpica, que tendrá al ministro del Interior como máximo responsable. Habrá: 17.505 policías nacionales, 11.500 guardias civiles, 6.000 miembros de las Fuerzas Armadas, 2.300 bomberos, 12.200 miembros del Samur, 3.300 de la Cruz Roja, 9.000 de la Policía Municipal y 4.700 de Protección Civil.