Valenzuela pide más apoyo institucional para superar la crisis del sector manufacturero

El presidente de la Cámara de Comercio de Alicante, Antonio Fernández Valenzuela, pidió ayer a la administración más apoyo para superar la crisis por la que atraviesan las industrias del sector manufacturero de las comarcas alicantinas. A juicio del titular del ente cameral, la recesión de este sector es el único lunar "de la buena marcha de la economía alicantina. Valenzuela, en el marco de la Noche de la Economía Alicantina, insistió en la necesidad de incrementar los recursos hídricos de la provincia y consideró insuficiente las alternativas del programa Agua del Gobierno central.

"Salvo la industria tradicional, la economía de Alicante va bien", según la Cámara

Con el parque temático Terra Mítica de Benidorm en plena suspensión de pagos, el estamento empresarial alicantino optó por el escenario de la Ciudad de la Luz, complejo audiovisual que se levanta en la partida de Agua Amarga, al sur de la ciudad de Alicante, como escenario de la tradicional Noche de la Economía Alicantina, que ayer cumplía su 31ª edición. Antonio Fernández Valenzuela, presidente de la Cámara de Comercio (entidad que promueve la iniciativa en cuyo desarrollo se entregan los galardones a las empresas que el ente distinguió en 2004) justificó la elección del inconcluso marco -las obras, cuya ejecución comenzó hace cuatro años, aún están lejos de finalizar- en la necesidad de difundir entre el empresariado las bondades del nuevo proyecto lúdico. A juicio de los promotores, el Consell, la Ciudad de la Luz galvanizará el futuro de la actividad económica de la capital.

El acto congregó a más de 2.000 personas, entre ellas la flor y nata del empresariado autóctono, liderado por el presidente de Cámara y el titular de la patronal, Coepa, Joaquín Rocamora. Y junto a ellos, Arturo Virosque, presidente del Consejo de Cámaras de la Comunidad Valenciana, y Rafael Ferrando, presidente de la patronal autonómica, Cierval. Y a la sombra del estamento empresarial, un florido exponente de la clase política, con el presidente del Consell, Francisco Camps, y el delegado del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Antoni Bernabé, a la cabeza.

El bando político se completó con representantes de cargos públicos del PP -esta vez de ambos sectores, campistas y zaplanistas-, entre ellos, el presidente la Diputación de Alicante, José Joaquín Ripoll, y el alcalde de la capital, Luis Díaz Alperi. La nómina del primer partido de la oposición la encabezó el secretario general de los socialistas valencianos, Joan Ignasi Pla, y el portavoz del grupo socialista de la Diputación, Antonio Amorós.

Los discursos que clausuraron el acto corrieron a cargo del presidente del Consell y del titular de la Cámara de Comercio de Alicante. El primero se afanó en borrar las sombras que amenazan con el horizonte económico de la provincia. Camps tiró de la estadística para rechazar que la economía alicantina está en crisis: "El 60% de los empleos creados en los últimos dos años en la Comunidad Valenciana han sido en Alicante", dijo. El presidente de la Generalitat no olvidó su clásico discurso e insistió en la "urgencia" de nuevas infraestructuras hídricas (trasvase del Ebro) y de comunicación (tren de Alta Velocidad) para mantener el ritmo de crecimiento económico en la provincia de Alicante. El presidente pasó de puntillas ante la crisis de la industria tradicional manufacturera (fabricación de calzado y textil) que atenaza el desarrollo de las comarcas del Vinalopó y L'Alcoià.

El presidente de la Cámara de Alicante optó por un discurso más reivindicativo, sobre todo ante gobierno central. Antonio Fernández Valenzuela reclamó inversiones para garantizar el abastecimiento de agua (ya que ve insuficiente las infraestructuras previstas en el programa Agua del Gobierno central socialista). También exigió el AVE y agilizar las obras de ampliación del aeropuerto de L'Altet. Valenzuela, por el contrario, sí se explayó en la crisis de la industria manufacturera, a su juicio, como consecuencia de su inadaptación a la economía global. "Salvo la crisis estructural en los sectores manufactureros, la economía provincial va bien", sentenció Valenzuela.

Antes de los discursos, la Cámara entregó los premios a los distinguidos en 2004, entre ellos la tienda Benavent, que cumple un siglo de trayectoria empresarial, y el premio Comercio a la firma Snke, en la categoría de mercantil creada por inmigrantes. Este año la Gala de la Economía Alicantina se celebró conjuntamente con la escuela de negocios Fumdesem, que conmemoró su 40 aniversario.