_
_
_
_
Columna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Casos

Hay periódicos y partidos políticos que viven de la existencia de casos. Cuando no los hay, no se venden periódicos y no parece existir actividad política en la oposición. Cualquier actuación que se quiera seguir contra esos partidos o para neutralizar la acción de los periódicos se basaría en que no existieran casos, aunque en realidad en los últimos tiempos se los inventan sin que pase nada. Si no hubiera, la empresa editora y el secretario general tendrían que devanarse los sesos. Mientras los leones se comen a los cristianos, se sigue buscando con un farol un caso real que echarse a las páginas, como Diógenes pero al revés. Parece que la justicia ha desmontado al que dieron en llamar permutazo en Sanlúcar la Mayor, al no detectarse caso alguno, aunque nadie se ha disculpado, ni con el Ayuntamiento ni con las personas implicadas. Nos entretuvo un tiempo. Fue bonito mientras duró. Ya nadie se acuerda del llamado caso Benalup, quizás porque nunca hubo nada o porque no había manera de implicar a nadie por más que se jalease y se inquiriese desde el PP a los periodistas para que investigasen, posiblemente porque ellos mismos no encontraban manera de hincar el diente. Y para qué hablar de ese grandioso caso de la democracia española, equiparable al GAL o a Filesa, ese ejemplo de corrupción sin parangón que ha puesto patas arriba el sistema: el de las facturas falsas del Ayuntamiento de Sevilla, que ha terminado con la dimisión de un concejal del PSOE y dos del PA con una serie de chapucitas encadenadas en la gestión municipal sevillana. Ha sido mayor el gasto de la comisión de investigación que el del dinero que se ha perdido. Tempestades en vasos de agua. Casos. Concluidos ya estos tres, la lupa de quienes nos defienden de la corrupción irá a la búsqueda de otros casos, como esos torpedos que se lanzan al agua buscando el calor del objetivo y no paran hasta que dan con algún blanco, aunque por ahora el que los lanzó no ha sido capaz de conseguir su objetivo. El alguacil ha salido alguacilado. Así nos entretenemos: cartelitos, casos, amagos de acuerdos parlamentarios, camisetas naranjas y otras minucias mientras termina de llegar el verano para que los que velan por todos nosotros sean capaces de hallar más casos para los titulares entre chapuzón y chapuzón. Hay muchas familias que viven de los casos. Y todos comen.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_