Un hombre muere al ser arrollada su furgoneta por un tren en Cuenca

Un industrial de Cuenca, Pedro H. E., de 50 años, murió ayer en el interior de la furgoneta que conducía tras ser arrollado por el tren que hacía el trayecto Cuenca-Madrid, cuando cruzaba por un paso a nivel sin barreras en las afueras de la capital conquense.

El siniestro se produjo hacia las 11.40, cuando la furgoneta Opel Vivaro que conducía la víctima trataba de cruzar la línea Madrid-Cuenca-Valencia, en una zona de chalés y fincas de recreo, según ha informado el concejal de Bomberos del Ayuntamiento de Cuenca, Javier Priego.

El tren regional acababa de salir de la estación de Cuenca diez minutos antes. Tras el impacto, arrastró a la furgoneta unos 150 metros, lo que provocó la muerte instantánea de su único ocupante. Los bomberos tardaron casi una hora en poder sacar el cadáver de los restos de la furgoneta, debido a que quedó prácticamente incrustada en la locomotora.

El industrial fallecido poseía una finca en las inmediaciones del paso a nivel que comunica la antigua carretera N-400 (Toledo-Cuenca) con una zona de chalés y fincas de recreo próxima a la capital conquense.

Los 50 pasajeros que viajaban en el tren regional resultaron ilesos, tras el choque, pero no pudieron continuar el viaje por ferrocarril, debido al arrollamiento mortal. Renfe puso a disposición un autobús para su traslado a Madrid.

Según la operadora ferroviaria, la furgoneta invadió la vía al paso del tren regional a la altura del kilómetro 147,7 de la línea Madrid-Cuenca-Madrid y a tan sólo cuatro kilómetros de la estación conquense. Aunque el paso a nivel carece de barreras, sí dispone de "señales verticales de stop y ceda el paso". Según el concejal Javier Priego, el industrial fallecido debía de conocer las características del paso a nivel por sus frecuentes viajes a la finca próxima al lugar de su muerte.