Miguel Ángel Perera: "Espero no defraudar"

Miguel Ángel Perera (Puebla del Prior, Badajoz, 1983) se presentó en Madrid como novillero el 6 de junio del pasado año, cortó tres orejas y salió a hombros por la puerta grande. Vuelve esta tarde a su segunda comparecencia, pero ya como matador de toros, para confirmar la alternativa de manos de César Rincón y con Matías Tejela como testigo.

"Hemos diseñado la preparación de acuerdo con el alto compromiso que supone debutar en Madrid", dice el torero; "entreno, pienso y me relajo viendo toros y montando a caballo, porque tampoco quiero taponarme la cabeza con la confirmación".

"No estoy obsesionado, no", continúa Perera, "porque ya he tenido otros compromisos importantes y he puntuado, pero sé que habrá muchas miradas puestas en mí, tengo dudas sobre cómo me recibirán...".

Dice Miguel Ángel Perera que guarda recuerdos imborrables de su presentación como novillero en Las Ventas -"un triunfo como aquél no se consigue todas las tardes"-, pero no quiere volver la vista hacia el pasado. "Lo único que me importa", afirma, "es que mi primera temporada ha sido positiva, que he ido en un lento ascenso pero con paso firme, aunque soy consciente de que he despertado muchas expectativas y espero no defraudar, especialmente esta tarde".

Confiesa que tiene ya contratadas muchas corridas para este año, que aumentarían en número y cotización si su paso por Las Ventas se refrenda con un triunfo. "Porque Madrid es Madrid, es mucho para un torero...".

Se atreve a calificar como clásica su forma de torear, aunque matiza que "se torea como se es, y yo creo que soy un torero serio, honrado y con la verdad por delante"; y está de acuerdo con los que opinan que es torero poderoso: "Es verdad que le puedo bastante a los toros con la muleta, pero espero que hoy ninguno me haga perder los papeles".