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Signos

Molina Navarrete reúne sus "versos más sentidos de andariego" en 'Al encuentro de la felicidad'

Ginés Donaire

"Ser feliz es también una lucha por ser libres para ver y vernos tal y como somos, por ser comprensivos, para saber de justicia, de paz y de verdad, por tener amor, para que nadie nos impida adentrarnos y nadar en el mar de los sueños posibles es imposibles". El escritor, poeta y dramaturgo Ramón Molina Navarrete (Úbeda, Jaén, 1951) reflexiona en voz alta sobre la felicidad, la condición humana y la vida misma en su último poemario, Al encuentro de la felicidad (Editorial Amarantos, 2005), un título que supone toda una declaración de intenciones del autor.

En el libro, que forma parte de la colección Ibiut, Molina Navarrete ha recopilado sus "versos más sentidos de andariego". Lo hace en 67 poemas donde el escritor de la ciudad de los Cerros da muestra de su poesía honda e intimista, a veces descorazonada, pero siempre con una alta carga de humanismo y de compromiso social. Se rebela contra las prisas de la sociedad actual, habla de los desengaños, del dinero -al que define como "la cárcel de los miedos"-, de la pobreza en el Tercer Mundo, de la marginación de la mujer, de la inmigración, del amor, del poder, de la avaricia y de los aduladores.

Molina Navarrete, autor de numerosos libros de poesía y obras teatrales, no oculta su pesimismo sobre el futuro de los poetas: "Los poetas se mueren de tristeza / en medio de las sombras / que no supieron nunca de ternura, / en medio de un desierto / de monedas vacías / que andan comprando oscuras soledades. / Los poetas se mueren cualquier atardecer", señala en uno de sus poemas. El escritor ubetense, que ejerce de profesor en el instituto de Secundaria Los Cerros de su ciudad natal, marca una frontera también con la poesía y los autores que buscan complicidad con el poder. "Si buscas influencias / y sombras alargadas que te avalen / es porque reconoces en ti mismo / lo muy poco que vales".

Galardonado con numerosos premios literarios, Molina Navarrete es el director de la revista cultural Ibiut, que él mismo fundó en 1981, y dirige desde su creación el grupo de teatro Maranatha, que cumple 25 años representando la pasión viviente de Cristo y que llena las 500 butacas del teatro de la Safa en la veintena de representaciones que lleva a cabo todos los años.

Un libro, en definitiva, donde Ramón Molina Navarrete se sumerge en la búsqueda de los caminos que llevan a la felicidad: "La felicidad es una lucha / por escapar del homicidio / de las horas y conocernos, / algo así como un destino / que nos eleva, / que nos lleva a vaciarnos de egoísmos, / que nos hace libres / para que no nos atenacen, con sus hilos, / las telas de la araña que llevamos, / desde que nacimos, anidando en las esquinas del alma".

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