Zapatero dice que sólo el PSE unirá las "dos mitades" de Euskadi
Patxi López condiciona cualquier pacto de Gobierno a que el 'lehendakari' sea socialista
El PNV continúa "erre que erre" con un plan que ya ha fracasado, y el PP se cierra a cualquier "innovación". Esta reflexión sirvió ayer de base al secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, para afirmar que sólo el PSE será capaz de traer la paz y "unir a las dos mitades" en las que está dividida Euskadi si gana las autonómicas. El peso recae en su homólogo vasco, Patxi López, que sólo contempla "un Gobierno de cambio con lehendakari socialista".
La conferencia política celebrada por los socialistas vascos el fin de semana en el Kursaal de San Sebastián aprobó, sin ningún voto en contra y con sólo dos abstenciones, el programa que López presenta para los comicios del 17 de abril. La dirección del PSOE está dispuesta a volcarse en esta campaña y a apoyar a López, tal y como enfatizó Rodríguez Zapatero, ante los socialistas de base y una ejecutiva muy satisfecha por cómo había quedado definido en el programa el término "comunidad nacional": "sin tocar ni una coma de la Constitución española".
Elorza no estuvo en el acto
El alcalde donostiarra, Odón Elorza, no estaba en la sala. La dirección del PSOE fue informada de que tenía "un viaje fuera de España". Se perdió así un acto en el que dio la sensación de que Zapatero y López habían acordado intercambiar proyectos de futuro, con la premisa de que este último será el próximo presidente vasco. En el intento de que no se hagan especulaciones sobre sus intenciones tras las elecciones, López quiso dejar claro, de manera solemne, algo que ha venido diciendo pero que sus adversarios políticos no tienen en cuenta. "No admitimos otra hipótesis que no sea la de un Gobierno de cambio presidido por un lehendakari socialista. Ése es nuestro terreno de juego y en él tendrán que moverse quienes quieran hablar con nosotros".
Los argumentos que justifican una afirmación tan tajante los ofreció después Rodríguez Zapatero. "El PSE" es la única fuerza política capaz de sacar al País Vasco de una situación "sin salida", dijo. "Ésta va a ser la legislatura del entendimiento, de la convivencia y de la paz, con todos los vascos juntos, de la mano de Patxi López y con pleno apoyo del Gobierno de España", señaló. A su juicio, el PNV "ha fracasado" porque no ha sabido unir a la sociedad, y porque "erre que erre repite lo mismo, sin dar salidas". Y "el PP tampoco sale del no a cualquier innovación y avance". "La historia enseña", según Zapatero, "la imposibilidad de construir un país por mitades". "Un proyecto que representa al 51% frente al 49% no sirve para nada y tampoco al contrario". Por eso apeló, una y otra vez al PSE, como única fuerza que puede lograr que todos los vascos se sientan cómodos.
Zapatero se ofreció a López para ayudarle a que su Gobierno tenga éxito. Su homólogo vasco se lo había pedido poco antes, no sin advertirle de que no será un lehendakari cómodo. "Exigiré que tu Gobierno, José Luis, se comprometa a fondo con el proyecto común y compartido por todos los vascos", le dijo. Que trabaje para que el País Vasco "recupere" el protagonismo "en España y Europa". "No quiero una Euskadi condenada a la irrelevancia". En medio del optimismo que presidió la asamblea, Zapatero recordó que el 17 de abril hará un año que tomó posesión de su cargo como presidente del Gobierno. Y cree que es una premonición, que ese día, a medianoche, todo apuntará a que López será el próximo lehendakari.
Mesa de reforma estatutaria
Su autoridad como líder de los socialistas vascos había salido reforzada de la votación del programa electoral, así que el candidato a lehendakari, Patxi López, subió al escenario del Kursaal cargado de argumentos para asumir compromisos con la sociedad vasca en nombre de su partido. Ya había anunciado que si llega a Ajuria Enea convocará a todas las formaciones democráticas para conseguir un acuerdo para la defensa de las libertades y contra el terrorismo. E insistió en ello, pero anunció además la convocatoria de otra mesa para consensuar "el futuro del autogobierno". "Queremos reformar el Estatuto para mejorarlo, no para abandonarlo", precisó, con reproche incluido al PNV.
En su intervención, López dejó claro que, además de priorizar cuestiones relacionadas con derechos y libertades, no se olvida del "bienestar de la ciudadanía". Y eso requiere, según él, impulsar el diálogo social, sentando en una misma mesa al Gobierno, a los sindicatos y a los empresarios para alcanzar un pacto por la competitividad y el empleo. Pero también reforzar la democracia, la transparencia y la participación -agilizar los trámites para la iniciativa legislativa popular o crear una oficina de control presupuestario-, y ahondar en las mejoras sociales. Entre otras cosas, López se comprometió a que ninguna pensión quede por debajo del Salario Mínimo y a hacer su prioridad del "empleo estable y de calidad".
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