Montes dimite en el Barça

Manolo Flores es desde hoy el núevo técnico del Barcelona. El hasta ahora jefe de la sección de baloncesto del club sustituye a Joan Montes, que ayer presentó su dimisión después de que el equipo sumara el sábado, en Lugo, su tercera derrota consecutiva. Fue la gota que colmó el vaso tras una semana nefasta en la que el Barça fue eliminado a las primeras de cambio de la Copa del Rey, en Zaragoza, y vapuleado días después por el CSKA de Moscú en el Palau.

Sin embargo, según el propio técnico, no han sido los malos resultados acumulados en los últimos días los que han llevado a Montes a dimitir del cargo. Él responsabiliza a la afición del Palau de forzar una renuncia que, según apuntó a este diario, ya había decidido el viernes, tras la derrota frente al conjunto ruso en la Euroliga. "Veía que el público estaba muy crispado y que esa crispación afectaba a los jugadores", expuso Montes. "Me considero capacitado para dirigir el equipo, pero con el público en esta actitud es difícil jugar. Los jugadores lo notan".

La dimisión de Montes pone punto y seguido a una temporada excesivamente convulsa para el Barça. Responsable de la cantera, se vio obligado a aceptar el cargo al que Svetislav Pesic renunció, justo antes de que se iniciara la temporada, por desavenencias con el entonces director técnico de las secciones, Valero Rivera, que también dimitió un par de meses después. Montes se encontró con un equipo hecho y sin demasiado margen de maniobra. "Entonces no se explicó bien que el cuadro no era tan competitivo", se lamentó; "aun así, iniciamos bien el curso [el Barça ganó la Supercopa y la Liga catalana], pero la gente se empeñaba en hablar de crisis".

Así las cosas, "y por el bien del equipo", Montes presentó la dimisión. "Ahora algunos jugadores ya no tendrán el escudo del entrenador", concluyó, sin dar nombres.

Flores ya fue ayudante de Aíto García Reneses y sustituyó a Boza Maljkovic en la temporada 1991-92.