_
_
_
_

Condiciones draconianas

Volver la vista atrás al cabo de 25 años no deja resquicio a la duda sobre las condiciones excesivamente severas con las que el Gobierno de la UCD puso para acceder a convocar el referéndum sobre la autonomía para Andalucía. Se trataba de someter a consulta popular si, como había ocurrido a las llamadas comunidades históricas - Cataluña, País Vasco y Galicia-, también Andalucía accedía a la autonomía por la vía prevista en el artículo 151 de la Constitución, más rápida y con más competencias para el autogobierno, o por el 144, considerada la "vía lenta".

El partido del Gobierno, la UCD, decidió no respaldar la vía del 151 y preconizó la abstención bajo el lema "andaluz, este no es tu referéndum" en una campaña que fue más corta que las de las otras tres comunidades históricas y en la que gastó también menos dinero en la campaña institucional. Aquella decisión provocó la dimisión del entonces ministro de Cultura, Manuel Clavero Arévalo.

En protesta por todas las trabas puestas al referéndum, el presidente de la Junta preautonómica, Rafael Escuredo, hizo una huelga de hambre de tres días, seguida por simpatizantes de la autonomía plena en 61 ciudades, que consiguió ciertos efectos publicitarios que ayudaron a difundir la existencia del referéndum

La pregunta que se sometió a votación en el referéndum era además un auténtico galimatías difícilmente entendible para una mayoría de ciudadanos: "Da usted su acuerdo a la ratificación de la iniciativa prevista en el artículo 151 de la Constitución, a efectos de su tramitación por el procedimiento establecido en dicho artículo?".

El Gobierno puso como condición que para que el sí prosperara debía conseguir la mayoría absoluta del censo electoral en cada una de las ocho provincias, no valía el total, y siempre que votaran más de la mitad de los electores. Y en todas triunfó menos en Almería, donde faltaron 21.464 votos.

El propio Clavero Arévalo denunció las irregularidades en el censo, donde se incluyeron personas fallecidas y a quienes cumplían 18 años en 1980, pero después del 28 de febrero, por lo que no pudieron votar. Unos y otros contaron como abstención.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_