Bush y la UE sellan una etapa de cooperación tras la fractura de Irak

El presidente de Estados Unidos, George Bush, y los líderes europeos sellaron ayer el inicio de una nueva etapa de cooperación y reconciliación, con concesiones mutuas en temas que les han separado en los últimos años como Irak o la situación en Oriente Próximo. Los aliados estrenaron un nuevo tono en la cumbre de la OTAN, por la mañana, y de Estados Unidos con la Unión Europea, por la tarde. Los líderes de la UE expusieron a Bush su primera iniciativa común de seguridad en Irak, con la formación de 770 policías y magistrados. Y Bush les dijo lo que querían oír: que él defiende una "Unión Europea fuerte".

"Estados Unidos ha tomado conciencia de que algo ha cambiado y es más realista que en el pasado a la hora de comprender el peso y la calidad de la Unión Europea", dijo Jacques Chirac, presidente francés. Bush, por su parte, citó decenas de veces en sus intervenciones a la "Unión Europea", no sólo a Europa, y recalcó: "No deben tener dudas de que deseo que el proyecto europeo sea un éxito". La reunión de 90 minutos que celebró por la tarde con la UE se centró también en Oriente Próximo, donde todos coincidieron en compartir el objetivo común de la paz.

Por la mañana, los líderes de los 26 países de la OTAN acordaron potenciar el papel de la Alianza como foro de debate político y estratégico entre los aliados. En respuesta a las demandas de Alemania, la OTAN se puso de acuerdo en que la Alianza Atlántica sigue siendo "el foro esencial de consulta sobre seguridad entre Europa y América del Norte". Los 26 cerraron el duro capítulo de las divisiones por la guerra de Irak con el compromiso de todos de participar en la formación del nuevo Ejército iraquí. El presidente español, José Luis Rodríguez Zapatero, reiteró ante Bush el compromiso de España en la lucha contra el terrorismo internacional y presentó los programas de cooperación con Irak y Afganistán.