Medina pide una auditoría de cuentas tras el fraude del interventor
El alcalde de Orihuela, José Manuel Medina, del PP, anunció ayer que el martes propondrá en un pleno que la Sindicatura de Cuentas intervenga y haga una auditoría en el Ayuntamiento, después de que el interventor haya reconocido a la policía un fraude a las arcas públicas. Según Medina, la intervención de la Sindicatura se pedirá "sin perjuicio" de que los servicios económicos y jurídicos del Ayuntamiento prosigan "de forma exhaustiva para poder dilucidar el alcance de esta situación y la implicación que personalmente cada uno pueda tener".
Medina aseguró que desconoce las declaraciones que el interventor realizó en una comisaría de Policía de Zaragoza y manifestó que lo único que sabe es que se ha autoinculpado de unas presuntas irregularidades. El pasado viernes el alcalde ordenó la apertura de una investigación interna para aclarar la supuesta desaparición de 66.111,33 euros de las arcas municipales y confirmó que había denunciado en fiscalía a un funcionario, hermano del interventor, quien posteriormente pidió la baja.
En rueda de prensa, el alcalde explicó que como instructores del expediente disciplinario que se le abrirá hoy al interventor actuarán los servicios del área de personal.
El ex alcalde de Orihuela Luis Fernando Cartagena declaró ayer que coincidió en Zaragoza con el interventor "de casualidad", en el interior de la basílica de El Pilar. Cartagena aseguró que no tiene "absolutamente nada que ver" con ese asunto.
Los grupos de la oposición, reunidos ayer por la tarde, recordaron que Medina lleva sin someter a aprobación las cuentas municipales desde 2002. "La situación es caótica", dijo anoche un portavoz de la oposición. "Medina es el máximo responsable de las cuentas".
