Uno de los suicidas dejó tres hojas escritas para su familia

Abdennabi Kounjaa, Abdallah,autor material del 11-M y uno de los suicidas de Leganés, dejó escritas a mano y en árabe tres cuartillas dirigidas a su mujer, sus hijas y sus suegros. En ellas cuenta que va a ser mártir de forma inminente, pide a sus hijas que sigan "a los hermanos mujahidines" y escribe, en lo que parece una clara referencia a lo ocurrido en los trenes: "La religión ha venido con la sangre y con los cuerpos troceados".

Los pasajes principales de la carta son éstos: "Para mi mujer: tu marido ha vivido anhelando este trabajo. Gracias a Dios que me guió en este camino y te digo que ya no hace falta pensar en venir a España (...). Para mis suegros: he dejado esta vida porque no es valiosa y quiero encontrarme con Dios y que esté satisfecho conmigo. Os digo que si honráis a vuestra hija no la dejéis que emigre a los países infieles (...). Para mis hijas: vuestro padre tenía moral y pensaba mucho en la yihad y hablaba de ello con la familia, que me asustaba del sufrimiento de la cárcel (...) pero con la ayuda de Dios he podido hacer este trabajo (...). La religión ha venido con sangre y con los cuerpos troceados".

"(...) No soporto vivir en esta vida como una persona débil y humillada bajo la mirada de los infieles y tiranos (...). No os apenéis, soy el mártir de la fatiga (...). Como dijo el chej Iben Taiimiyeh, si mis enemigos me encarcelan será mi retiro; si me liberan será mi turismo y si me matan será el martirio (...). Prefiero la muerte a la vida, espero que sigáis los hechos, la yihad en el Islam (...). A los tiranos y Occidente convertidlos en vuestros enemigos y que Dios los maldiga".