El arte se echa a la calle Madrid Abierto despliega sus propuestas entre la plaza de Cibeles y la de Colón

La Consejería de Cultura, el Círculo de Bellas Artes y el área de Gobierno de las Artes del Ayuntamiento de la capital se han aliado para sacar el arte a la calle a través del programa Madrid Abierto. Hasta el próximo día 27, todo aquel que recorra Madrid a pie o en transporte público se topará con edificios de colores, fotografías gigantes en las paradas de autobuses o improvisados museos de objetos cotidianos. La segunda edición de Madrid Abierto concentra sus propuestas artísticas entre la plaza de Cibeles y la de Colón, aunque también ha conseguido un hueco en el Museo de Escultura al Aire Libre de la Castellana.

La compañía De Caracas, formada por las artistas Ángela Bonadies y Maggy Navarro, ha elegido los autobuses de las líneas 14 y 45 para enseñar a los viajeros algunos parajes de la capital venezolana con fotografías dentro de los vehículos y en varias paradas integran el proyecto Espacio Móvil, que pone todo su interés en el espacio urbano y los conceptos de circulación y movilidad.

Por su parte, Anne Lorenz y Rebekka Reich han montado una instalación sonora en una docena de taxis de la ciudad para reproducir los recuerdos de la capital madrileña que guardan algunas personas que vivieron allí hace años. "Las creadoras intentarán sorprender y entretener al pasajero introduciéndole en la memoria de un extraño y provocándole un lapso en el tiempo", comentan los responsables de Madrid Abierto.

Los espacios al aire libre también han atraído a los participantes de Madrid Abierto. Así, María Alós y Nicolás Dumit Estévez han montado un museo en el paseo de Recoletos (boulevar impares, de lunes a viernes, de 10.00 a 20.30, y los sábados, de 10.00 a 14.30) con objetos cedidos por ciudadanos que visitan, trabajan o viven en los alrededores. El objetivo de este museo de los peatones es, según sus inventores, "preservar el espíritu de barrio y la presencia de los peatones en un lugar determinado a través de una colección que crece con los objetos personales de los donantes".

Unos metros más arriba, rumbo a la plaza de Castilla, en el Museo de Esculturas al Aire Libre del paseo de la Castellana, Henry Eric Hernández ha colocado su Zona vigilada, en la que compara la realidad española con la cubana mediante dos proyecciones simultáneas debajo del puente de Juan Bravo (a las 19.00 y a las 22.00). La fachada de la Casa de América se convierte en una almena de andamios para uso público con pantallas de colores para observar la plaza de Cibeles "desde otro punto de vista" por obra de José Dávila. Este Mirador nómada estará abierto de lunes a viernes de 17.00 a 22.00, y los sábados, de 11.00 a 22.00.

Otras propuestas artísticas que adornan la ciudad son las cajas de metal instaladas por el colectivo Tercerunquinto en el paseo de la Castellana cerca de Eduardo Dato; la colección de fotografías de familias españolas de los setenta en la fachada del Círculo de Bellas Artes, obra de Fernando Baena; los faros de color que Óscar Lloveras ha plantado en el paseo del Prado, o la publicación El Río, las cosas que pasan, que Raimond Chaves ha introducido en el canal de proyecciones del metro madrileño y en el mobiliario urbano.