Ecologistas rechazan la urbanización de zonas de Cádiz

El representante de Ecologistas en Acción de Cádiz Mariano Maeztu presentará denuncias ante las juntas rectoras de los parques naturales de Grazalema y Los Alcornocales por el proceso de urbanización "galopante" que se prevé en la zona. La asociación ha advertido sobre las previsiones de construcción de hasta cinco campos de golf en el entorno de las reservas y la edificación de complejos urbanísticos, "incluso dentro de las mismas, una vez recalificados los suelos".

Maeztu explicó ayer que, en el caso de Prado del Rey, una localidad de 6.000 habitantes inscrita en el ámbito del parque de los Alcornocales, aunque situada a sólo 18 kilómetros de Grazalema, el Ayuntamiento diseña un plan urbanístico "que triplicará la población actual" y estudia la concesión de licencia para un campo de golf que, en su opinión, es "una excusa para la recalificación de 758.000 metros cuadrados de terreno y la edificación de un complejo de 800 viviendas".

Zona degradada

De hecho, los ecologistas advierten sobre la posibilidad de que el Ayuntamiento solicite, en el marco del nuevo plan de ordenación urbana, que se recalifiquen unos cinco millones de metros cuadrados de suelo del parque. Se trata de una zona degradada, que ha sufrido un proceso masivo de construcción de viviendas ilegales. Para Maeztu, considerar ahora urbanizables estos suelos supondría "recompensar a quienes, de hecho, han cometido un delito por construir dentro del parque natural". En su opinión, de prosperar esta posibilidad, "se sentará un precedente y se abrirá la puerta para que se construya de manera ilegal en terrenos protegidos".

La intención del sector privado por impulsar la construcción de campos de campos de golf y complejos urbanísticos vinculados puede en el corto plazo, sin embargo, toparse con una nueva norma reguladora anunciada por la consejera de Obras Públicas, Concepción Gutiérrez. En respuesta a una denuncia de Los Verdes en Málaga, Gutiérrez ha anunciado que su departamento tiene en estudio un decreto que restringa el desarrollo de campos de golf, entendidos como "el patio interior de las urbanizaciones". La Junta pretende separar ambas actividades, la deportiva y la inmobiliaria, para evitar el desarrollo solapado de grandes proyectos urbanísticos.