_
_
_
_

Las 18 muertes de La Todolella se produjeron en poco más de una hora

El fiscal afirma que los que buscan responsabilidades "se precipitan"

María Fabra

Poco más de una hora. Ése es el tiempo que tardaron en morir los 18 invitados que se quedaron a dormir en el albergue de La Todolella, de acuerdo con los informes de las autopsias. Éstos han establecido la hora de las muertes entre las 9 y las 9.30 de la mañana del pasado domingo. Una persona que se encontraba en una casa rural cercana ha declarado que a las ocho de la mañana los fallecidos todavía seguían de fiesta.

Los informes de las autopsias realizadas sobre los 18 cuerpos de los fallecidos el domingo en el albergue de La Todolella (Castellón) señalan como hora de la muerte la franja entre las 9 y las 9.30 de la mañana. De esta manera, el fallecimiento se produjo en en poco más de una hora ya que una persona, Javier Gallart, que se encontraba en una casa rural próxima, sostuvo haberlos visto a las ocho de la mañana, antes de que se acostaran tras celebrar una fiesta de cumpleaños. Los análisis de toxicología solicitados por los médicos forenses confirman además, como causa del fallecimiento, la intoxicación por monóxido de carbono. Ésta fue provocada por las estufas de uso industrial que se instalaron en la habitación en la que dormían todos ellos, debido a que la calefacción, tal como se les había dado a conocer, no funcionaba. Los exámenes realizados sobre los cadáveres, según fuentes del Instituto de Medicina Legal, no revelan signos de angustia ni arañazos de los que se deduzca que intentaron salir de la estancia. Las mismas fuentes apuntaron que los cuerpos estaban intoxicados al 100%, ya que esa intoxicación provoca la paralización de las extremidades y no hay ningún signo que haga pensar que hubieran intentado salir del lugar.

Por su parte, la Consejería de Turismo hizo público ayer el hecho de que el albergue de La Todolella no estaba incluido en el Registro de Alojamientos Turísticos de la Comunidad Valenciana. Según fuentes de la consejería, todos los establecimientos turísticos están regulados por un decreto autonómico que determina la autorización de su apertura y funcionamiento. Según las mismas fuentes, la inclusión en dicho registro es "obligatoria" y el albergue de La Todolella no lo estaba desde el mes de mayo del pasado año, cuando el Ayuntamiento pidió el cese de la actividad del local como albergue rural. El mismo Consistorio, del que depende el edificio, solicitó en junio de 1998 la autorización turística del albergue y, tras una visita del inspector, se observó que el establecimiento cumplía todos los requisitos recogidos en el Decreto de 1994. Posteriormente pidió la baja y desapareció del registro.

Fuentes de la misma Consejería de Turismo declararon ayer a Efe que si el albergue hubiera sido promocionado como un local turístico y ofrecido a turistas, la Administración autonómica podría haber hecho una inspección e imponer una sanción. Este hecho era posible porque la propia web oficial del departamento recogía y publicitaba el albergue hasta el mismo lunes. Sin embargo, fuentes del mismo departamento no justificaron ayer por qué esta información había "desaparecido" ayer.

En cualquier caso, el fiscal jefe de la Audiencia de Castellón, Javier Arias, manifestó ayer que "la gente que está buscando responsabilidades se precipita". Además, señaló que "no hay que confundir una posible ilicitud administrativa con una ilicitud penal" y explicó que "no todo hecho ilícito administrativamente hablando es una actividad antijurídica y reprochable". Javier Arias sostuvo que "en derecho penal las especulaciones no sirven y la única presunción admitida es la de inocencia" y añadió que en el Código Penal también se regula la figura del "hecho fortuito".

Preguntas en el aire

José Luis Higueras, padre de una de las fallecidas en el albergue de La Todolella, está dispuesto a presentar una denuncia con la que pretende "buscar responsables si es que alguien ha cometido una irresponsabilidad". José Luis no entiende cómo se permitió la celebración de la fiesta en el albergue cuando "se necesita un permiso especial porque eran más de cincuenta". "Para mí no fue un accidente. Tengo muchas preguntas en el aire que nadie me contesta. Quiero saber por qué murió mi hija con 22 años", señaló ayer. El juzgado número 3 de Vinaròs instruye las diligencias para el esclarecimiento de los hechos en un sumario sobre el que se ha decretado el secreto. José Luis Higueras esperará a que finalice la instrucción y la investigación. "Y no me voy a conformar si le dan carpetazo", añadió.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_