Alud de críticas a Maragall por comparar el Carmel con el 'Prestige'

"Desafortunadas". Así de rotundos se pronunciaron ayer los socios del PSC en el Gobierno catalán, Esquerra e Iniciativa, a la hora de evaluar las palabras del presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, que el domingo comparó los daños ocasionados en el barrio del Carmel con la catástrofe del petrolero Prestige. Cada partido realizó su propia interpretación sobre la analogía del presidente, pero todos coincidieron en criticarla.

A juicio del secretario general de ERC, Joan Puigcercós, la comparación fue poco acertada porque "supone reconocer que ha habido negligencia" por parte del Gobierno. Interpretaciones aparte, Puigcercós opinó que en la gestión del Carmel ha habido errores y llevó su deducción hasta el final: "La Generalitat y el Ayuntamiento de Barcelona han de tomar medidas".

Puigcercós avanzó que su grupo votaría a favor de una comisión de investigación parlamentaria en caso de que CiU la solicitara. ICV no descartó apoyar la propuesta pero, de momento, se mantendrá a la espera. En opinión del vicepresidente de los ecosocialistas, Jordi Guillot, es preferible escuchar primero las palabras del consejero de Política Territorial, Joaquim Nadal, que mañana comparecerá en el Parlament. En una línea más pragmática, Guillot aseguró que la prioridad es "resolver los problemas urgentes de las familias".

Los convergentes, siempre dados a buscar culpables en el Gobierno, exigieron ayer la cabeza de algún consejero. Artur Mas, líder de la federación, criticó la mala gestión de la crisis, denunció la ocultación de información y apuntó a Joaquim Nadal como el máximo responsable de estas deficiencias. "Una dimisión inferior a un consejero sería insuficiente", proclamó.

El otro partido de la oposición, el PP, utilizó adjetivos similares pero distintos argumentos. En opinión de su portavoz, Daniel Sirera, los daños ocasionados por el Prestige fueron fruto tan sólo de "un terrible accidente" mientras que lo sucedido en el Carmel es un "claro error" del Gobierno catalán.

Críticas desde Galicia

A Maragall las críticas también le llovieron desde Galicia. El secretario general de los socialistas gallegos, Emilio Pérez Touriño, no apreció similitudes entre ambos sucesos. Aun así, trató de justificar a Maragall diciendo que el presidente tal vez hablaba "desde el impacto que le ha causado el socavón". El Bloque Nacionalista Galego consideró la comparación "imprudente y sin proporción".

Desde el Gobierno gallego, el vicepresidente segundo de la Xunta, el popular Xosé Manuel Barreiro, opinó que lo principal ahora es la "solidaridad" con los afectados y dijo que entendía que desde Cataluña se pida el mismo nivel de responsabilidades que se exigió con el caso Prestige.