Concha Velasco, en plenitud
Sólo excepcionales actrices como Concha Velasco, de tan dilatada y rica trayecto
ria pese a su juvenil imagen, que tantas veces nos ha brindado sus destacadas interpretaciones en Cádiz y su provincia como en toda España, pueden permitirse por sus explícitas e innatas dotes artísticas el dar vida a la importante obra del extraordinario escritor alicantino Gabriel Miró, a través de su relevante obra Las cerezas del cementerio.
Entre tanta vulgaridad audiovisual, el asistir al estreno televisivo de la obra de Gabriel Miró, con la excelente interpretación de Concha Velasco enseñoreando la pequeña pantalla, fielmente secundada por un gran equipo de actores y de técnicos, ha sido una excelente manera de conmemorar los 75 años del óbito en Madrid, del autor de Años y leguas, y que ya en 1908 otorgó a su novela Nómada su máxima distinción un jurado integrado por Valle-Inclán, Pío Baroja y Felipe Trigo. Una novela, una narrativa, tan personal, mezcla afortunada de viñeta descriptiva y crónica impresionista.
La interpretación de Concha Velasco en la plenitud indiscutible de su arte aquilatado, sólo merecedor del más encendido elogio, nos ha evidenciado una vez más las grandes cualidades de esta gran señora de la escena, que no sólo precisan de excepcionales dotes de la singular actriz que siempre ha sido y es, sino el poseer un físico sencillamente portentoso, que hace realidad la frase de Jardiel Poncela: "Hay señoras que cada año descumplen dos".
Algo que adquiere mucho más valor aún si tenemos en cuenta sus ininterrumpidas incursiones en otros géneros que con su imagen increíblemente joven domina Concha Velasco. Ahí están sus logros con obras de Antonio Gala, con su Hello-Dolly, sus películas con Luis García Berlanga, Pedro Olea, Jaime Camino, Mario Camus, Jaime de Armiñán, sin olvidar la serie dirigida por la cordobesa Josefina Molina, en la que dio vida a santa Teresa de Jesús, dándonos medida de su rica diversidad de estilos y caracteres, sólo reservados para los elegidos por el destino, hasta conseguir hacerse tan querida, cercana y familiar, desde sus remotos tiempos con Celia Gámez o Manolo Caracol.
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