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MÚSICA EN 7-D

Emir Kusturika trae la furia de su película 'La vida es un milagro'

El cineasta y músico Emir Kusturika hace valer esta semana las dos facetas por las que se le conoce. Al tiempo que estrena su última película La vida es un milagro, se presenta con su banda de siempre, No Smoking Orchestra, para mostrar en directo la música de su banda sonora, concebida por él. Fanfarria balcánica con actitud punki que bien podría firmar también Amparo Sánchez, la granadina que capitanea Amparanoia.

- Volcán balcánico. Con la Orquesta de No Fumadores, que dirige su propio hijo, el baterista Stribor, Emir Kusturika vuelve tres años después a Madrid para intentar desplegar otra vez toda su furia balcánica. Sus conciertos son trepidantes de principio a fin, aunque él quede siempre en segundo plano cediendo protagonismo al cantante y al violinista de la orquesta, además de a su propio hijo. Un despliegue sin descanso de fanfarria balcánica que une el punk con la música tradicional de la antigua Yugoslavia, el country con la sonoridad gitana de carromato o el folk con los ecos zíngaros. Una celebración constante que esta vez trae la música de La vida es un milagro, su última película, que también estrena estos días en Madrid.

Muy de cerca le siguen los últimos proyectos de Amparanoia, el festivo combo que lidera la granadina Amparo Sánchez. El furor de los Balcanes también ha calado en su música, que sigue haciéndola compatible con su pasión por Cuba, la ranchera, el blues, el ska trepidante y combativo, y hasta el bolero. Amparanoia es la propuesta española más seria de eso que se llama la verbena global, que curiosamente se alinea en los movimientos antiglobalización.

Rebeldía con alegría se llama su último disco que recopila parte de las luminosas canciones que Amparo Sánchez ha creado desde que publicó El poder de Machín, primer disco oficial de Amparanoia tras haber dejado formaciones como Amparo and the Gang o Ampáranos del Blues. Sobre él versará los dos conciertos que va a dar en el Café la Palma, que abría precisamente sus puertas hace diez años para acoger los primeros conciertos madrileños de Amparo Sánchez recién llegada de Granada cuando todavía lideraba Ampáranos del Blues.

- Telúricos. La conexión con la música de raíz tiene esta semana dos protagonistas indiscutibles: el vallisoletano Eliseo Parra y el gaditano Javier Ruibal. Parra va a pasar la semana entera en el Central entregado a ese folclore moderno que consiste en rescatar la sonoridad de la tradición musical y revisitarla con todo el conocimiento y la cultura que da vivir en pleno siglo XXI. Viva quien sabe querer es, hasta la fecha, su último disco, aunque ha pasado el suficiente tiempo de su publicación como para esperar que esta semana dé a conocer nuevas composiciones.

Ruibal vuelve al Galileo tras varios meses de ausencia, cuando lo habitual en los últimos años era un recital al menos cada mes. Nadie como él sintetiza toda la esencia del sur, con sus dejes aflamencados, andalusíes y magrebíes, que arrima con precisión a la canción de autor, al jazz y al pop. Las damas primero sigue siendo su último disco, pero también se espera de él que presente canciones nuevas. Hace poco más de un año, un recopilatorio suyo, Sáhara, con canciones de sus trabajos Contrabando y Las damas primero se editaron sólo con el sello británico Word Music Network. Además, Ruibal tiene ahora una canción, Atunes en el paraíso, propuesta para los premios Goya de la Academia de Cine pues forma parte de la película Atún y chocolate que ha supuesto el debú como director de Pablo Carbonell.

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Admirador brutal de la obra de Ruibal es Lichis, el líder y cantante de La Cabra Mecánica. A Lichis le encanta coger el bajo y participar en Outro Jazz, un proyecto paralelo que practica ese jazz bailable que algunos llaman acid jazz. Hay también respeto a la tradición en las propuestas de Paloma Berganza y Horacio Icasto, que juntos han publicado Boulevard latino, donde la voz de la cantante se funde con el pianista para repasar parte del cancionero brasileño y francés; o en la de la cubana Mayelin, que Pablo Milanés ha aventurado en confesar haber visto en ella a "una de las grandes divas de la música cubana contemporánea". Además, hay flamenco del bueno con Vicente Soto Sordera; y de futuro, con Kimi'K, que se lee igual al derecho que al revés, y que está formado con hijos de los Ketama, los Carmona, los Montoya y los Jiménez, todos de solera flamenca.

- Del pop del mundo. La visita del cuarteto estadounidense Luna se aprecia como la actuación pop más importante de estos días, con el permiso de los sevillanos Bombones, el gran descubrimiento de la psicodelia española del último año. La importancia de la actuación de Luna es que forma parte de una gira de despedida, pues así lo anunciaron sus componentes en otoño cuando publicaron Rendezvous, el último disco oficial de una banda de pop ensoñador. La versión española de los postulados de Luna podría venir de La Naranja China o de Nacho Vegas, con sus diferencias claras. Sus actuaciones también dan color en esta semana primera tras el paréntesis navideño.

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