El PP reitera en su congreso de Madrid que Moratinos debe ser destituido
El PP echó ayer el cierre a sus congresos regionales con la proclamación de Esperanza Aguirre como presidenta de los populares madrileños. Ella se comprometió a hacer del PP de Madrid el "escaparate" y el "modelo" para "ganar las elecciones sin renunciar a ninguna de las convicciones" de su partido. Y a recuperar pronto el Gobierno para Mariano Rajoy. Éste utilizó su discurso de cierre para reclamar de nuevo la dimisión o destitución del ministro de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, salvo que éste retire sus acusaciones de que Aznar apoyó el golpe de Estado en Venezuela en 2002, y pida disculpas. "No cuesta nada. Puede decir: 'Me llevaron a un programa y estaba cansado; me equivoqué y les pido a ustedes disculpas'. Pero no, han preferido hacer lo que han hecho", resumió Rajoy.
También en el capítulo de política exterior, Rajoy se burló del "acuerdo de la vicepresidenta primera con el programa de televisión Gran Hermano para promocionar la Constitución europea debe ser para sustituir en esa labor al ministro Moratinos". Su militancia le rió la gracia. Y le aplaudió cuando, ya en serio, Rajoy pidió al Gobierno que, en vez de promocionar el referéndum europeo en programas de variedades, "organice debates políticos en la televisión pública, aunque tenga que debatir en ellos con sus socios, que se oponen a la Constitución europea".
Escaparate para España
Antes que Rajoy, la nueva presidenta del PP de Madrid, Esperanza Aguirre, prometió que "la Puerta del Sol será el kilómetro cero del camino de Mariano Rajoy a La Moncloa". Aseguró que el PP de Madrid será "un escaparate de la buena gestión política y de que otro Gobierno es posible". Aguirre enarboló "la fe en la libertad y la decidida defensa de la Constitución" como los valores de un PP que quiere representar a "la España del trabajo y la responsabilidad" para, "con patriotismo" y sin renunciar a sus "convicciones", ganar las próximas elecciones.
Buena parte del discurso de Aguirre sonaba con la misma rotundidad y dureza de los de José María Aznar. Por ejemplo, cuando dijo: "Nos acusan de fundamentalistas porque defendemos la nación española. Dicen eso porque ellos carecen de fundamentos. No los tienen ni éticos, ni políticos, ni intelectuales".
Alberto Ruiz-Gallardón, alcalde de Madrid, se puso ayer a disposición de la nueva presidenta del PP de Madrid tras dejar claro que ni era su candidata ni, probablemente, contó con su voto. "El PP de Madrid ha tomado la decisión de elegir a Esperanza Aguirre como nuestra presidenta", aseguró Gallardón. "La habéis votado mayoritariamente", constató. "Comprometo desde aquí mi lealtad a Esperanza como presidenta del partido", dijo. Y ofreció "el apoyo incondicional de los que quedaron en minoría a los que ganaron la mayoría", porque "en democracia quien gobierna gana".
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