La Guardia Civil interviene ocho toneladas de hachís en Sevilla y Granada

La Guardia Civil ha intervenido casi cinco toneladas de hachís y ha detenido a cinco personas por su presunta pertenencia a una red dedicada a la introducción de droga en España desde Marruecos, en una operación desarrollada en Motril y Salobreña (Granada), informa Efe. La operación se desencadenó al detener una patrulla en la N-340, en la zona conocida como Barranco Enmedio, una furgoneta que circulaba en sentido a Motril sin luz en uno de los faros, y se comprobó que en el interior había 1.700 kilos de hachís en fardos.

En Puebla del Río (Sevilla), agentes de la Guardia Civil y de la Policía Local detuvieron el pasado nueve de noviembre a dos personas que transportaban tres toneladas de hachís . Los dos detenidos, J. M. R. A, de 22 años y A. H. B, de 56, fueron sorprendidos cuando transportaban la droga, que habían recogido en la orilla del río Guadalquivir, en un camión a una nave industrial de la zona, según fuentes del Instituto Armado. Otra persona fue detenida y está imputada como supuesta colaboradora de la banda.

Los dos supuestos traficantes levantaron la sospecha de los agentes de la Guardia Civil por circular de madrugada con barro incrustado en los bajos del camión, que evidenció que los conductores habían pasado recientemente por una zona de marismas. Los agentes del Instituto Armado avisaron a la Policía Local y desplegaron un dispositivo de control en las carreteras de varios municipios sevillanos. En una travesía de Puebla del Río dieron el alto al camión y descubrieron el alijo de droga envuelto en fardos.

Uno de los detenidos, vecino de La Línea de la Concepción (Cádiz), tiene antecedentes penales por contrabando, mientras que A. H. B., un camionero de Coria del Río (Sevilla) cuenta con historial delictivo por robo. Tras las dos detenciones, los agentes de la Guardia Civil rastrearon la orilla del río y descubrieron otro fardo con hachís. También encontraron, atracada en el muelle de un puerto deportivo de Sevilla, la embarcación que presumiblemente se utilizó para transportar la droga desde una nave en aguas del Atlántico. La droga provenía de Marruecos y su destino era Inglaterra y Holanda, según las mismas fuentes. El dueño de la embarcación alquilada quedó en libertad después de ser detenido por la Guardia Civil. Los otros dos detenidos han ingresado en prisión.