La primera ciudad de ocio de la España interior
El público oyó hablar por primera vez del parque de la Warner en San Martín de la Vega en 1997. Aquel año, el Gobierno regional, entonces presidido por Alberto Ruiz-Gallardón, reconoció por primera vez que estaba en negociaciones con la multinacional americana para levantar un parque temático en Madrid. Pero el entonces consejero de Urbanismo de la Comunidad, Luis Eduardo Cortés, llevaba ya un año comprando medio millar de hectáreas de suelo rústico en este municipio del sur de la Comunidad. No fue hasta 1998 cuando la multinacional tuvo acabados los planos: 150 hectáreas -ampliables- destinadas a atracciones (7,5 veces más grande que el Parque de Atracciones de la Casa de Campo). Ruiz-Gallardón la calificó entonces como la primera "ciudad del ocio de la España interior".
Pero pronto comenzaron los problemas. Las empresas yeseras que actuaban en la zona reclamaron sus derechos sobre los terrenos, ya que esta parte de la región está declarada cuadrícula minera. Por eso, el parque no es cuadrado como prentendían sus promotores, sino que su perímetro es muy irregular con el fin de sortear los permisos mineros vigentes.
El día que fue inaugurado el parque, el 6 de abril de 2002, un gran chaparrón cayó sobre las instalaciones, preludio de su tormentosa existencia. Ruiz-Gallardón aseguró, no obstante, que la zona de ocio permitiría al "sur de la región mostrar su capacidad de liderazgo económico con esta apuesta por una de las primeras industrias del país, la del ocio".
San Martín, el día de la inauguración se echó a la calle. Pero lo que iba a ser una gran apuesta de futuro para el desarrollo del pueblo, no terminó de cuajar. El público no acudía en el número previsto, ya que las instalaciones, tal y como han reconocido sus promotores, no se ajustaban al gusto del consumidor. Ahora, comienza otra etapa.
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