María Lavalle vuelve a La Abadía con Juan Diego
Hace poco más de un año que la cantante María Lavalle estrenó su espectáculo La pena golfa, en el que mostraba las raíces comunes que en los dos últimos siglos se han establecido entre el tango y el fado. Durante este tiempo Lavalle ha llevado de gira este recital mestizo con el que ahora vuelve al teatro de La Abadía, junto al actor Juan Diego.
Dos representaciones únicas, que ofrecerá hoy y mañana, en las que une el bandoneón con la guitarra española y la guitarra portuguesa. Lavalle y Diego se presentan junto a Jorge Lema y Carlos Gonsálvez, entre otros músicos de prestigio.
Lavalle, quien recuerda que tanto el fado como el tango nacen en ciudades portuarias emblemáticas, como Buenos Aires y Lisboa, dice de estos géneros musicales: "Nacen en los burdeles para pasar luego a los salones y finalmente son los intelectuales los que caen rendidos ante ellos", comenta.
Lavalle, de origen bonaerense y afincada en Madrid desde hace años, señala que el lunfardo (jerga utilizada por los argentinos) está salpicado de múltiples términos que vienen del portugués como mina, buraco, descangallado o gayola. Los tangos que interpreta en el recital no son del repertorio gardeliano, sino de autoras como Tita Merelo o Mercedes Simone: "Han sido nombres que hay que tener muy en cuenta a la hora de hablar del tango argentino y sobre todo unas heroínas, porque el mundo del tango era atrozmente masculino", dice Lavalle, cuyo espectáculo encierra un homenaje a estas mujeres.
La pena golfa. Teatro de La Abadía (Fernández de los Ríos, 42). Hoy y mañana, a las 20.30. Entradas 30 euros.
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