"Quiero tener en enero el protocolo de fusión"

Luis Navarrete (Sabiote, Jaén, 1955) lleva menos de tres meses en la presidencia de Caja San Fernando, a la que llegó tras el fallecimiento en agosto de su predecesor, Alfredo Pérez Cano. Su designación sucedió también a una época convulsa en el PSOE sevillano, del que fue secretario provincial hasta este año. En su nuevo cargo, que le obligó a dejar la presidencia de la Diputación de Sevilla, su objetivo confeso es consolidar el cambio de tendencia en los resultados de la caja, con beneficios que crecen por encima del 30%, y acelerar la fusión con El Monte, estancada desde hace cuatro años.

Pregunta. ¿Cuáles son las claves que explican esa mejora en los resultados económicos de la caja?

"Nos saldremos de inversiones en ladrillo para poner fondos en sectores emergentes"

"No hay nada que impida que la unión con El Monte se haga cuanto antes"

Respuesta. Las claves hay que buscarlas en el magnífico trabajo que se ha hecho en los dos últimos años. En eso ha intervenido muy directamente la persona que ya no está, el anterior presidente, y los profesionales de la casa. Se ha hecho un trabajo para que hubiese mucha más eficiencia en la caja, para cambiar la cultura inversora que había en años anteriores, se ha estado más encima del negocio y menos pendiente de otras cuestiones. Nos encaminamos a consolidar una caja que quiere crecer de forma sostenida y volver a ser lo que fue: un referente financiero en las zonas en las que opera.

P. Con sólo un mes en el cargo, aprobó un importante cambio de organigrama, ¿fue una decisión personal o ya estaba tomada?

R. Es una decisión que se toma ahora, bajo esta presidencia y bajo la nueva dirección general, que lleva sólo un año. La caja ha afrontado una serie de cambios en los últimos tiempos que ahora se han culminado. Había una necesidad de adaptar la estructura a los nuevos objetivos del negocio; y también de un organigrama que facilitara las conversaciones con El Monte para el proyecto de fusión.

P. El último intento de fusión se paró por la obligada adaptación a nuevas leyes y cambios en los equipos directivos de las dos cajas. Pero ahora esas restricciones ya no existen, ¿se ha hecho algo para retomar la fusión?

R. En estos dos meses, hemos mantenido conversaciones entre las presidencias para materializar el protocolo de intenciones para la fusión, en el que marcaremos tanto los tiempos como los trabajos que hay que desarrollar para presentar el proyecto a los órganos de gobierno de las cajas y a la Junta. Mi intención y mi deseo es que a principios de 2005 podamos materializar ese protocolo.

P. Y después, ¿cuánto tiempo se tardará en elaborar el proyecto de fusión?

R. En las conversaciones que estamos teniendo, analizamos qué tipo de trabajo tenemos que llevar a cabo, cuando eso se concrete le pondremos tiempo. En enero podremos marcar un calendario.

P. En los dos últimos intentos, se adelantó mucho trabajo, ¿será una fusión rápida?

R. La fusión conlleva distintas etapas; hay un periodo de estudio de la situación de cada entidad, de balances, de oficinas, de personal... Para esa etapa sí hay mucho trabajo hecho que sirve. Pero luego hay una segunda etapa, de aprobación de los órganos de gobierno, la autorización de la Junta y el informe del Banco de España, procesos todos con tiempos reglados. Y finalmente hay otro tiempo que culmina con la elección de nuevos órganos de gobierno de la caja fusionada.

P. Dentro de ese trabajo adelantado está el acuerdo laboral, que UGT [sindicato mayoritario en la caja] no firmó.

R. Habrá que hablar con los sindicatos, claro. En esta caja ya se aplicó un acuerdo laboral de convergencia hacia esa fusión. Pero habrá que ver cuál es ahora la situación laboral. Es un trabajo que está dentro de ese periodo primero del que hablaba.

P. ¿Ha percibido alguna desconfianza sobre la fusión, tras tanto intento frustrado?

R. Es verdad que hay motivos para no creérselo. Pero mi voluntad, y la he defendido desde fuera de la caja y ahora desde dentro, es terminar este proceso. Porque creo que es fundamental para todo el esquema financiero de Andalucía, sobre todo en las provincias que más implantación tenemos ambas cajas. Hay que aunar esfuerzos para conseguir una entidad financiera sólida, solvente y con capacidad de competir en este mercado financerio. Hay ese convencimiento y lo hay en las opiniones de partidos, sindicatos y entidades empresariales. Es verdad que ese amplio consenso se da desde hace tiempo, pero ahora mismo no hay nada que impida que la fusión se haga lo antes posible.

P. La Junta reclama más cooperación entre las cajas andaluzas.

R. Hay muchos proyectos en los que ya cooperamos. Pero sí es necesario profundizar en esa cooperación. De hecho, en las conversaciones con presidentes de otras cajas andaluzas ese interés y esa voluntad está. Y estoy convencido de que en los próximos tiempos se van a llevar a cabo actuaciones conjuntas.

P. Ha comenzado la expropiación de los terrenos de Tablada, que simbolizaron la política especulativa de las cajas sevillanas bajo las presidencias de Juan Manuel López Benjumea e Isidoro Beneroso. Ahora que está usted en la presidencia, ¿conoce las razones por las que un grupo de inmobiliarias compró esos suelos a las cajas por 82 millones, cuando ya se sabía que iban a ser expropiados?

R. En aquel momento, no había una decisión administrativa plasmada. No sé, lo tendrían que explicar los compradores. Es verdad que eso coincide con un momento en que en Caja San Fernando se está redimensionando la inversión en ladrillo. Se plantea la necesidad de abrirnos a nuevos sectores amergentes, con empresas que van a generar riqueza para Andalucía. Lógicamente hay que salirse de ciertas inversiones para tener fondos para otros sectores. No vamos a dejar el sector inmobiliario, por supuesto, pero tenemos que hacer un esfuerzo por estar en otros, como el aeronáutico, las energías renovables o las empresas tecnológicas.

P. ¿Van a entrar en la gestión de algún astillero público?

R. Hasta ahora no hay ninguna propuesta formal a las cajas, y desde luego ninguna a Caja San Fernando. Ademas parece que la Comisión Europea le pone muchos problemas a esa posibilidad.

P. ¿Las cajas estan negociando con el Ayuntamiento alguna compensación en terrenos por mantenerse en Isla Mágica?

R. No se está negociando nada de eso que usted dice. Lo que se está negociando es el convenio con acreedores para la quita de la deuda Y ahí la pata fundamental es saber si el Instituto de Crédito Oficial firma el convenio. Yo creo que hay voluntad del ICO para firmar y voluntad de las cajas para que Isla Mágica siga funcionando. Antes del día 24, tiene que darse esa firma y estoy convencido de que se va a hacer, por las conversaciones que hemos tenido. Lo que sí quiero que quede claro es que desde Caja San Fernando vamos a hacer todo lo posible para que el parque siga funcionando, porque hay muchos puestos de trabajo en juego y es una actividad muy importante para el desarrollo del turismo en Andalucía.