El malagueño Rafatal prepara 'Cruzada en la carretera', su primer largometraje

Rafael Robles Rafatal, pelo de colores y estética gótica, se ha convertido en todo un personaje del mundillo cinematográfico. Va por su sexto cortometraje, en el que ha participado Terele Pávez (Los santos inocentes) y ya piensa en su primer largo: Cruzada en la carretera. Amable en el trato y apasionado en sus gustos selecciona lo que le gusta de cada aspecto de la vida y lo disfruta al máximo. "Soy un fan fatal de todo lo que me gusta", asegura.

A los 17 años se escapó a Madrid para conocer a Alaska. Del encuentro surgieron sesiones de fotos, y una colaboración de la líder de Fangoria en Manuela, el cinto, su cuarto corto. Estudió bachillerato por artes plásticas, se ha licenciado en comunicación audiovisual y está terminando su tesis doctoral, sobre violencia audiovisual. "Soy más de la catarsis que de la mimesis", explica, "creo que ver escenas de terror no hacen que las personas sean más agresivas".

En diciembre estrenará en Madrid El día de mi boda, ganador del VIII Certamen de Cortos Villa de Estepona (Málaga), y la semana pasada participó en el Festival de Cine Gay Lésbico de Madrid. "Me gusta contar historias con heroínas no habituales (...) me encanta el mito de Frankestein, de la belleza dentro de la fealdad".

Las alrededor 50 personas que han participado en Domicilio Habitual, su último trabajo no han cobrado, pero esto no impide que se hayan desplazado desde diversos puntos de la península o que le paren por la calle para pedirle un papel. El mundo del corto es un espacio libre, en el que, por el momento, no ha experimentado censura alguna. "Hay gente a la que prefiero no gustar", sentencia. El día de mi boda se proyectará el 19 de noviembre en el Festival de Cine de Huelva.