El 'sí' a la Constitución europea gana en la sectorial obrera de ICV

La votación sobre la posición que adoptar por Iniciativa per Catalunya Verds (ICV) ante la Constitución europea ha arrojado un claro resultado en favor del sí en la organización sectorial del partido formada por sindicalistas. ICV lleva a cabo un referéndum interno para determinar su posición sobre la Carta Magna europea. La dirección ha recomendado el no, pero los sindicalistas se han inclinado por el sí preconizado por Comisiones Obreras.

Las votaciones para el referéndum interno de Iniciativa comenzaron el 4 de octubre y finalizarán el próximo lunes. El resultado en la organización sectorial en la que militan mayoritariamente los sindicalistas dio una mayoría "impresionante" en favor del sí al tratado constitucional, según confirmó uno de sus miembros.

El sí ha resultado mayoritario también en alguna otra organización local. La dirección del partido ha decidido no facilitar "resultados parcializados", explicó Jordi Guillot a este diario, y dará a conocer el resultado global probablemente el mismo día en que finalice la votación.

Las organizaciones de ICV han celebrado hasta ahora unos 70 debates para facilitar la toma de posición de los afiliados en este referéndum interno, del que la dirección del partido se muestra muy orgullosa como ejemplo de democracia y participación en las decisiones de gran trascendencia política.

En estos debates participan un ponente que expone los argumentos en favor del sí y otro que defiende el no. Entre quienes preconizan la aceptación se cuentan figuras tan destacadas como Antoni Gutiérrez Díaz, ex secretario general del PSUC y ex eurodiputado de ICV, y el consejero de Medio Ambiente del Gobierno catalán, Salvador Milà. El rechazo es defendido por el actual eurodiputado Raül Romeva, y los vicepresidentes de ICV Jordi Guillot y Jaume Bosch, entre otros.

'No' crítico o avance posible

Guillot expresó su confianza en que el resultado global del referéndum interno se corresponda con el registrado en la votación llevada a cabo en el consejo nacional de ICV sobre la Constitución europea el 3 de octubre. El no preconizado por la dirección obtuvo en este organismo un apoyo del 66%, frente al 23% del sí y el 10% de abstenciones.

Para articular el debate interno se han distribuido a través de Internet sendos documentos sobre cada una de las dos posiciones. Los defensores del sí argumentan, en síntesis, que a pesar de sus insuficiencias, este tratado es un avance en la articulación de la Europa política frente a quienes quieren reducirla a un simple mercado. Advierten también de que un eventual rechazo de la Constitución significaría un paso atrás en la configuración de un "contrapeso" a la hegemonía mundial de Estados Unidos, mantendría la vigencia del Tratado de Niza, frenaría los avances sociales y el pronunciamiento en favor de la sostenibilidad y desdeñaría la puerta abierta al reconocimiento del catalán. Y recuerdan que en favor del sí está la mayoría del grupo de Los Verdes europeos, con Daniel Cohn Bendit y Monica Frassoni a la cabeza.

El no se presenta como la expresión de un europeísmo "crítico" con las limitaciones del tradado para la Constitución europea. Estas limitaciones, sostienen, dejan el texto muy lejos de los programas electorales defendidos por ICV y de los objetivos fijados por el Fórum Cívico para una Constitución europea. Afirman que el eventual triunfo del no en el referéndum que se llevará a cabo en España el 20 de febrero de 2005 debe ser interpretado como "un mandato al Gobierno español para que reinicie el proceso de negociación" de la Carta Magna europea.