El fiscal dice que tiene demasiadas cosas como para ocuparse del Yak

Fernando Burgos, el fiscal encargado del caso del Yak-42, en el que se investiga el accidente aéreo en el que perdieron la vida 62 militares españoles que regresaban de Afganistán, manifestó ayer a los periodistas que le preguntaron sobre la postura de la fiscalía respecto a las peticiones de las familias de las víctimas: "Yo tengo muchas cosas que hacer [como] para ocuparme del avión".

La Fiscalía General del Estado deploró ayer la desafortunada respuesta de este fiscal. En un comunicado emitido a media tarde, la institución que preside Cándido Conde-Pumpido señala que ha "puesto de manifiesto en diversas ocasiones su interés en apoyar plenamente el derecho de las familias de las víctimas del accidente aéreo del Yakolev 42 a que se investiguen hasta sus últimas consecuencias las circunstancias que determinaron el lamentable accidente que provocó la muerte de 62 militares españoles y los errores en la identificación de los cadáveres".

Por ello, la Fiscalía del Estado asegura que "deplora cualquier manifestación de la que pueda deducirse una falta de interés o de atención por parte del ministerio público en esta causa". Asimismo, reitera " su solidaridad con los afectados y su compromiso de impulsar decididamente el curso del procedimiento judicial". En ese sentido, Cándido Conde-Pumpido reiteró ayer "las instrucciones oportunas" a la Fiscalía de la Audiencia Nacional.

El fiscal jefe de la Audiencia Nacional, Eduardo Fungairiño, declaró a la Cadena SER que las manifestaciones de su subordinado se habían sacado de contexto y que habían sido indebidamente interpretadas. Y agregó que la causa del Yak-42 no había entrado en la Fiscalía de la Audiencia Nacional por lo que difícilmente el fiscal podía pronunciarse sobre lo que solicitan las familias.

El propio Fungairiño, sin embargo, emitió un comunicado, a través de la jefatura de prensa de la Audiencia en la que aparte de insistir en que las manifestaciones de Fernando Burgos habían sido tergiversadas y malinterpretadas, señalaba que el fiscal no había tenido tiempo de leerse el escrito del que le había dado traslado la juez. El fiscal jefe debería precisar cuál de sus dos versiones es la correcta: o no ha entrado el escrito en la fiscalía o no le ha dado tiempo al fiscal a leerlo.

El escrito en cuestión fue presentado por las familias de 20 de los fallecidos que reclaman entre otras cosas las exhumaciones de los cadáveres para que les sean practicadas necropsias y así corregir las identificaciones erróneas de los restos.

También solicitan la declaración como testigo del ex ministro de Defensa Federico Trillo y las declaraciones como imputados de los dos generales y los dos oficiales médicos que presuntamente realizaron las identificaciones de las víctimas.

Igualmente, los familiares reclaman de Defensa información y documentos sobre los funcionarios que se desplazaron a Turquía y los estudios de identificación realizados por el Instituto de Toxicología.