El presidente se centra en la defensa del PHN y elude el debate territorial
Francisco Camps, utilizó ayer su intervención ante el plenario del congreso nacional del PP para meterse a los compromisarios del partido en el bolsillo. Con una ponencia compartida con su homólogo murciano Ramón Luis Valcárcel sobre solidaridad y cohesión territorial, Camps optó por renunciar a los papeles e improvisó un discurso confortable para los compromisarios basado en la defensa del trasvase del Ebro como ejemplo de cohesión territorial. El jefe del Consell evitó cualquier alusión al modelo territorial para centrarse en la validez del Plan Hidrológico Nacional elaborado por el Gobierno Aznar -algo que nadie discute en el PP- y las críticas al PSOE por derogar el trasvase del Ebro. Más tarde, fuentes de su entorno justificaron la ausencia de referencias a las reformas estatutarias porque Piqué ya había explicado la posición del PP. Unas fuentes que insistieron en que lo importante era que la ponencia presentada por Piqué no entraba en contradicción con ninguno de los pronunciamientos de los valencianos respecto a la reforma del Estatuto de la Comunidad Valenciana. El entorno de Camps explicó también que el presidente optó por hacer un discurso corto y ágil que caldease el ambiente y animase a los compromisarios presentes en el plenario. Un planteamiento que obtuvo el reconocimiento de los delegados con aplausos. Francisco Camps inició su intervención dando las gracias a toda la militancia popular por su "apoyo y cariño" en la defensa del PHN, un proyecto que representa el concepto de "solidaridad" del proyecto popular. Y a partir de ese momento, Camps se lanzó a criticar al Gobierno socialista, al que acusó de "insolidario" por derogar el trasvase previsto para la Comunidad Valenciana, Murcia y Almería por la "presión de grupos radicales como Esquerra Republicana de Cataluña". Más aplausos. Y luego siguió animando a la militancia al explicar que para los populares de los territorios afectados por la derogación del trasvase, el momento actual se ha bautizado como "paréntesis Narbona", una denominación que en España se podría también calificar como el "paréntesis Zapatero" porque Mariano Rajoy obtendrá la presidencia del Gobierno en las próximas elecciones generales.
Camps acusó al Gobierno socialista de "insolidario" por derogar el trasvase
Por la tarde, la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá sí quiso aportar su propia visión sobre el debate territorial. Barberá tomó la palabra en representación de los alcaldes populares para recordar que el PP cuenta con nueve presidentes autonómicos y 23.000 concejales que permiten a los populares gobernar en 2.300 pueblos y ciudades. En su alocución, Barberá hizo defensa del municipalismo y acusó al PSOE de dejar a los ayuntamientos fuera del debate político español "porque no sabe qué hacer con ellos".
