Bancaixa subraya el estricto carácter financiero de su participación en la inmobiliaria Metrovacesa

La entrada de Bancaixa en Metrovacesa como tercer accionista de referencia con un 6% del capital confirma una decidida apuesta estratégica de la entidad por el sector inmobiliario y despierta recelos entre los promotores valencianos. Un portavoz oficial de Bancaixa subrayó ayer que la participación de la caja en la primera inmobiliaria española, cuyo volumen se duplicó el año pasado a raíz de la absorción de su rival Bami, tiene un carácter meramente financiero. "No queremos hacer negocios que no conocemos", apuntó.

Un portavoz de los promotores valencianos recordó, por su parte, la histórica oposición de la asociación a la participación de las cajas en negocios más allá de "la compra y venta de dinero". Las grandes cajas valencianas financian muchas de las promociones que se desarrollan en la Comunidad Valenciana y el sector no recibe de buen grado una implicación tan evidente con un competidor muy poderoso.

Pero el portavoz de Bancaixa replica: "Queremos hacer negocios con todo el mundo y no queremos machacar a nadie". Y añade: "Hay negocio para todos".

La construcción ha sido la locomotora del crecimiento económico en territorio valenciano durante los últimos años. El negocio se frena ligeramente, según todos los indicadores, pero sigue vivo.

Bancaixa posee Actura, una sociedad que gestiona suelo, y CISA, una empresa inicialmente destinada a vender el parque inmobiliario acumulado a raíz del impago de hipotecas. "Pero la tasa de morosidad es tan baja que fue necesario activar la sociedad y vender pisos de cualquiera", explica una fuente de la caja.

La expansión de Valencia a ambos lados de la pista de Ademuz, sobre unos terrenos que eran propiedad de Actura, descubrió a los responsables de Bancaixa el calibre del negocio inmobiliario. "Fuimos muy claros e invitamos a todos los grandes del sector a participar", recuerda la misma fuente.

La significativa participación de la caja en la primera inmobiliaria nacional demuestra, además, plena confianza de los responsables de Bancaixa en el futuro del negocio inmobiliario a medio plazo. Tanto como la escasa fiabilidad de otros sectores de corte industrial.