CiU pide amparo a Benach para cambiar el debate de política general

El presidente del Parlament, Ernest Benach, anunció ayer la convocatoria de una reunión de la Mesa de la Cámara para el próximo lunes con el objetivo de analizar el recurso de amparo que ayer presentó el grupo de Convergència i Unió (CiU). Los diputados convergentes solicitaron a Benach que recupere el formato habitual de los debates de política general, en el que tras la intervención del presidente de la Generalitat el protagonismo recaía en los grupos parlamentarios.

La queja de CiU viene suscitada por la decisión tomada esta semana por la junta de portavoces de incluir en el debate la comparecencia del conseller en cap, Josep Bargalló. El consejero republicano comparecerá un día después de la intervención del presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, y con anterioridad a que lo hagan los representantes de los grupos parlamentarios.

Los convergentes basan su petición en el artículo 123 del reglamento del Parlament. En éste se establece que el debate de política general "se iniciará con la intervención del presidente de la Generalitat", a cuyo término y antes de 24 horas, "intervendrá a continuación un representante de cada grupo parlamentario". Basándose en dicha norma y recalcando el término "a continuación", los convergentes reclamaron a Benach que restituya "el procedimiento legalmente previsto" en los debates. A juicio de CiU, una correcta aplicación del reglamento del Parlament impide que el conseller en cap tenga el protagonismo que en principio tendrá.

Y así será, a no ser que Ernest Benach decida lo contrario el próximo lunes. Será entonces cuando, tras su reunión con la Mesa, desvelará si tiene en cuenta la queja de los convergentes o si mantiene la estructura del debate, con la que también se ha mostrado en desacuerdo el PP.

"Imposición partidista"

Acompañando al amparo que reclamó CiU a Ernest Benach, se pudieron escuchar ayer diversas quejas que provenían de las filas convergentes. El portavoz de CiU, Felip Puig, calificó la intervención de Bargalló en el debate de "imposición partidista del Gobierno al Parlament, que vulnera gravemente el reglamento de la Cámara catalana".

En opinión de Puig, la decisión del tripartito "perjudica el normal y correcto desarrollo del debate más importante del año". El dirigente de CiU no se quedó ahí, sino que incluso aseguró que el nuevo esquema de debate decidido por la junta de portavoces "va en detrimento de los ciudadanos y ciudadanas de Cataluña y de su sistema democrático".

También dentro de CiU, el diputado Josep Maria Pelegrí manifestó que la junta "impuso" el modelo de debate. Por ello, Pelegrí reclamó ayer a Benach que atienda la queja "no sólo por razones jurídicas sino por ética democrática".