"... aliados incondicionales en la lucha contra el terrorismo"

Respuesta del presidente a las observaciones del nuevo embajador del reino de España, Carlos Westendorp y Cabeza, con motivo de la presentación de sus cartas credenciales

"Señor. Embajador,

Me complace aceptar sus cartas credenciales de parte del Rey Juan Carlos I, que le designan como Embajador Extraordinario y Plenipotenciario del Reino de España, y acuso recibo de la Carta de Renuncia de su distinguido predecesor, Javier Rupérez. Gracias por su saludo en nombre del Gobierno y el pueblo españoles. Es un gran placer para mí darle la bienvenida a Washington.

Durante muchos años, España y Estados Unidos han gozado de una profunda y productiva relación a distintos niveles. Nuestras comunidades empresariales están ampliando sus lazos comerciales. Los pueblos estadounidense y español están cada vez más unidos por el idioma, el intercambio educativo y el turismo. El legado español en Estados Unidos se extiende desde California hasta Tejas y por toda Florida.

"Estoy convencido de que la excelente relación será cada vez más profunda"

"España coopera para combatir a los enemigos de la libertad"

España y Estados Unidos siguen siendo aliados incondicionales en la guerra contra el terrorismo. Tras sufrir la amenaza interna durante más de tres décadas, el 11 de marzo España se convirtió en un campo de batalla de la guerra global contra el terror. El pueblo estadounidense está con España y las víctimas de este trágico y cobarde ataque. El Gobierno español está contraatacando para defender a sus ciudadanos y derrotar a los que promueven el terror. Para lograr ese objetivo, ha incrementado la financiación destinada a combatir el terrorismo y ha aprobado una nueva ley sobre financiación terrorista que permite a España congelar más fácilmente las cuentas de sospechosos de delitos de terrorismo. España coopera estrechamente con Estados Unidos y otros Gobiernos para combatir a los enemigos de la libertad. Los ataques del 11 de marzo de 2004 y el 11 de septiembre de 2001 no sólo conmovieron a nuestros países, sino a todo el mundo civilizado. No permitiremos que triunfe el terrorismo.

España combate junto a otras naciones libres en la lucha por la democracia y su propagación. Tiene tropas en Afganistán y los Balcanes, y se ha comprometido a dirigir la policía y el contingente militar hispano-marroquí en Haití. Los militares españoles están ayudando a llevar la paz y la libertad a millones de personas a las que se les ha negado la libertad demasiado tiempo. Esos hombres y mujeres valientes han sido nobles y generosos en su sacrificio por ayudar a otros a conseguir la libertad.

Estoy convencido de que la excelente relación entre nuestras dos naciones será cada vez más profunda en los meses y años venideros. Los retos globales requieren una estrecha colaboración entre amigos y aliados. No me cabe la menor duda de que Estados Unidos y España seguirán trabajando juntos para promover los valores democráticos y fortalecer la seguridad global para garantizar el bienestar de nuestros ciudadanos.

Una vez más, señor Embajador, le doy la bienvenida a Washington y le deseo lo mejor durante su estancia en Estados Unidos como Embajador del Reino de España.