Segundas rebajas
La novillada lidiada ayer careció de casta, raza, fuerza y cuernos. ¿Dónde están los cuernos?, exigieron desde el tendido. La novillada corrida tenía el trapío propio de los becerros.
Los becerros lidiados los cobraron como novillada picada. Para colmo, los tales novillos abecerrados resultaron ser el remate final de las segundas rebajas. Los novilleros actuantes, al igual que sus oponentes, carecieron de raza. La novillería actual no sale como la de antaño a comerse al novillo, a intentarlo todo con el valor por bandera. Sin valor no hay nada que hacer, se decían. Los aspirantes de la actualidad precisan de paso quedo, figura encorsetada, mueca seria, buena voz y gomina al gusto. Como las figuras. Los novilleros actuales no predican de conocimientos, por eso desprecian la lidia. Por afán tienen plantificarse a la pala de los pitones y largar trapazos más a diestro que a siniestro, como las figuras. Los que trabajaron ayer no se salieron del guión. Roberto Carlos, pesado y distante. Morenito de Aranda, encimista y embarullado. Tomás Escudero, agitanado pero verde.
Sánchez / Roberto, Morenito, Escudero
Novillos de herederos de Ángel Sánchez: descastados, sin fuerza ni presencia. Roberto Carlos: oreja en los dos. Morenito de Aranda: ovación y dos orejas. Tomás Escudero: ovación en los dos. Plaza de Toros de Valladolid, 4 de septiembre. 1ª de Feria. Media plaza.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.