"El mejor equipo de la historia"
Odriozola augura al atletismo más medallas que en Barcelona, y Montaner deja a su técnico
"Contamos con una docena de atletas entre los diez primeros de la clasificación mundial en sus respectivas pruebas. Así que probablemente se puedan superar las cuatro medallas logradas en Barcelona en 1992". Derrochando optimismo e invocando a los oros de Daniel Plaza en los 20 kilómetros marcha y Fermín Cacho en los 1.500 metros, la plata de Antonio Peñalver en decatlón y el bronce de Javier García Chico en pértiga. Así presentó ayer José María Odriozola, el presidente de la federación, a la selección española. Unas expectativas que ignoraron los logros menores en Sidney 2000, donde la marchadora María Vasco fue la única en colgarse un metal, el bronce, del cuello.
El dirigente mostró una confianza absoluta en los 59 atletas, 36 hombres y 23 mujeres -el mismo número que los inscritos hace 12 años- que participarán en los Juegos de Atenas a partir del día 18, cuando Manolo Martínez pruebe suerte en el lanzamiento de peso en el mismísimo escenario de la antigua Olimpia. El leonés, capitán de la selección, campeón mundial bajo techo en 2003 y que ha llegado a los 21,06 metros este año, 41 centímetros por debajo de su mejor marca personal, es una de las grandes bazas españolas. También en el maratón Julio Rey, plata en los Mundiales de París el año pasado, luchará por hacerse hueco entre los africanos. Con ellos no acaban los candidatos al éxito. Paquillo Fernández, Jesús García Bragado y de nuevo María Vasco son algunas de las naves que pelearán en una de las especialidades que mejor se le dan a España, la marcha. Por no hablar de las posibilidades de Reyes Estévez en los 1.500 metros o de Glory Alozie, plata en Sidney en los 100 metros vallas bajo su bandera original, la nigeriana.
Aparte de los tres primeros puestos, el objetivo es cosechar el mayor número de diplomas olímpicos, premio que se otorga a los clasificados entre el cuarto y el octavo puesto, un sector en el que Odriozola incluye "de 15 a 20 atletas". Una duda es si la saltadora Niurka Montalvo, elegida en vez de Concha Montaner pese a tener una marca un centímetro inferior, estará entre las premiadas. "No ha sido fácil la decisión porque las dos tenían la mínima B. Pero el comité técnico de la federación cree que, por historial, proyección internacional y progresión en las últimas semanas, Niurka tiene más posibilidades en sólo tres saltos de clasificarse para la final", recalcó. Un acuerdo que la damnificada -rompió ayer con su entrenador, Rafa Blanquer, que también lo es de Niurka, informa Juan Pérez Ortiz- atribuye a "intereses políticos", por mucho que ayer tratara de explicarlo el presidente. "Desde el 3 de julio hasta el 6 de agosto, se han enfrentado cinco veces. En cuatro ha ganado Montalvo y en una, en los Campeonatos de España, Montaner", apostilló, valorando de paso la mejor trayectoria de la hispano-cubana, que no compitió en Sidney por el boicoteo del Gobierno de Fidel Castro.
Odriozola mostró su preocupación por los problemas que arrastra Yago Lamela en su pie izquierdo y de los que ayer mismo fue tratado en una clínica madrileña. El saltador de longitud abandonó los campeonatos nacionales tras sentir durante el calentamiento unas molestias musculares y tampoco compitió por precaución en los Iberoamericanos de Huelva el pasado fin de semana. Polémicas aparte, y algo molesto por los rumores de dopaje de la fondista Amaia Piedra y de Raúl Fernández, otro saltador, Odriozola no mitigó su mensaje: "Éste es el mejor equipo, el más fuerte, que hemos llevado a unos Juegos. Por cantidad y por calidad".
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