Desvío de camiones por turnos a la AP-7 entre Oropesa y Castellón

Los ayuntamientos de Castellón, Benicàssim y Oropesa llegaron ayer a un acuerdo con el Ministerio de Fomento para el desvío de los camiones por la autopista AP-7 durante el mes de agosto. Sin embargo, la liberación de la carretera nacional 340 de la circulación de vehículos pesados no se realizará de forma absoluta, sino que se han fijado turnos horarios y tramos para llevarla a cabo. El problema de la N-340 entre Castellón y Oropesa, por su volumen de tráfico y el número de accidentes se ha agudizado en los últimos años. Ese tramo soporta el paso de 40.000 vehículos diarios.

Serán desviados los camiones que circulen entre las 7 y las 10 de la mañana de los días laborables, procedentes del norte. Éstos tendrán que tomar el peaje de la AP-7 en Oropesa, vía por la circularán hasta la salida de Castellón sur. Por la tarde, serán desviados los vehículos pesados procedentes del sur, entre las 18 y las 21 horas de los días laborables, que habrán de tomar el peaje de Castellón sur hasta Oropesa. La medida será efectiva el próximo lunes 9 de agosto y estará en vigor hasta el viernes 10 de septiembre.

La carretera nacional 340, a lo largo de la provincia de Castellón, soporta, aproximadamente, el paso de 40.000 vehículos diarios, según fuentes de la dirección provincial de tráfico. La densidad en la circulación se ha visto agravada estos días por la realización de unas obras en los accesos a la capital de La Plana por el norte, lo que provoca graves retenciones en la entrada a la ciudad. Además, diariamente, miles de vehículos colapsan el tramo comprendido entre Castellón y Benicàssim, con la nacional 340 como única vía de comunicación, al margen de los caminos rurales y las vías interurbanas entre ambos municipios.

La medida de desviar el tráfico pesado por la autopista de peaje ha sido posible debido al acuerdo de los tres ayuntamientos para la financiación del precio que habrán de abonar a la concesionario de la carretera, Aumar por la utilización de la AP-7. Las previsiones realizadas apuntan a que el desvío puede suponer un desembolso de 500.000 euros, aunque la cantidad estará finalmente determinada por el número de camiones que accedan a los peajes. Los cálculos realizados apuntan a que , diariamente, serán desviados unos 3.100 camiones en ambos sentidos.

Por su parte, el Ministerio de Fomento y la Dirección General de Tráfico se encargarán de adoptar las medidas necesarias para la ordenación del tráfico y la señalización de los desvíos obligatorios.

El alcalde de Castellón, José Luis Gimeno, indicó ayer que la concesionaria de la autopista ha planteado un problema de seguridad, especialmente en la salida de Oropesa de los camiones que se dirigen hacia Barcelona. Este problema tratará de solucionarse obligando a los vehículos pesados que quieran incorporarse a la N-340 a salir en dirección hacia Valencia y a entrar en la carretera por la parte norte de Oropesa. Además, Gimeno mostró su confianza en que el acuerdo sirva "para reducir el número de accidentes que se producen en este tramo de la N-340".

Pacto en Madrid

El acuerdo para el desvío del tráfico pesado entre Castellón y Oropesa fue adoptado ayer en Madrid, durante una reunión en la que participaron el secretario general de Infraestructuras de Fomento, Antonio Monfort, el subdelegado del Gobierno en Castellón, Juan María Calles, el alcalde de Castellón y el recién nombrado alcalde de Benicàssim, Manuel Llorca. En cualquier caso, los detalles del convenio se abordarán en un reunión que tendrá lugar el lunes en la Subdelegación del Gobierno en Castellón.