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Nuevos tiempos, nuevas formas

Algo se mueve en el PSOE de Sevilla. Ya tocaba. El partido en la provincia de Sevilla estaba sumido en una especie de burbujea ajeno a la dinámica y a la evolución de una organización que ha ido adoptándose a los nuevos tiempos de la mano de José Luis Rodríguez Zapatero y de Manuel Chaves. Las pasadas elecciones generales y autonómicas del 14 de marzo constituyen el fiel reflejo de cómo esa forma de hacer política, ese talante cercano, conciliador y sin estridencias sintoniza a la perfección con la ciudadanía.

Los socialistas sevillanos, que representamos todos a la agrupación del PSOE de mayor implantación y mayor respaldo electoral, vamos a este congreso provincial con deseos de que sea un cónclave libre en el que impere el diálogo, la transparencia y la fraternidad.

Pero no podemos ignorar que las circunstancias han querido que los dos candidatos a la secretaría general de Sevilla compitan por ganarse el favor de los delegados y delegadas al congreso de este sábado y ello pone de manifiesto que el pluralismo es real, pero también que el riesgo de descalificaciones o los nervios de unos u otros ensombrezcan el ejercicio de la democracia interna del partido.

La tormenta del socialismo sevillano no se ha desencadenado sin que los nublados hayan aparecido con anterioridad. No se puede dar de lado por más tiempo a la realidad que vive el partido. Por un lado, la anomalía de liderazgos autodesignados ajenos a la ejecutiva provincial saliente enrarecía el ambiente desde hace años. Además, el partido, sus dirigentes, sus cuadros, tienen que renunciar a hábitos rancios, métodos obsoletos y prácticas añejas. Tenemos que subirnos al carro del cambio tranquilo. Ésa es la sensación generalizada y que ahora puede concretarse en el congreso.

Dicho de otra manera, en este congreso se enfrenta una concepción antigua de la política que se resiste a desaparecer y una apuesta nueva, cargada de futuro, que pugna por alumbrar. Desde mi ausencia de ambición de cargo orgánico alguno, pero con la experiencia de ocho años de secretaria general del PSOE sevillano, yo apuesto por el cambio en Sevilla que sintonice de verdad con Manuel Chaves en Andalucía y con José Luis Rodríguez Zapatero en Madrid.

Llegamos a este congreso provincial de Sevilla después de la recuperación en las urnas del Gobierno de la nación y de obtener una amplísima mayoría en las elecciones autonómicas de Andalucía. Ni la agrupación sevillana ni ningún militante van a aguar estos rotundos éxitos.

Precisamente, porque estos buenos resultados son de todos los afiliados, simpatizantes y votantes del PSOE que han visto cómo su participación ha servido para construir un futuro de progreso.

Hagamos un buen congreso. Un congreso mirando hacia el futuro. Sin ninguna renuncia a nuestras señas de identidad, a nuestra historia de 125 años y sumemos los valores de la igualdad, de la tolerancia, del diálogo a un proyecto de esperanza y bienestar para todos los ciudadanos. Éste será nuestro compromiso.

Carmen Hermosín Bono es diputada al Congreso de los Diputados por Sevilla y ex secretaria general del PSOE de Sevilla.

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