Un adolescente sólo cumplirá 4 años por asesinar y violar a una menor

La juez ha condenado a 12 años de internamiento a un menor, de 14 años, por asesinar y violar dos veces a una compañera de clase, de 13 años, en una urbanización de la costa de Orihuela (Alicante), el pasado 2 de abril. No obstante, el fallo recoge expresamente que, en virtud de la Ley del Menor, el condenado no podrá cumplir más de cuatro años de internamiento terapéutico cerrado y tres de libertad vigilada.

En el fallo, la titular del Juzgado de Menores número 2 de Alicante considera que el condenado, de 14 años, español de origen alemán, "se ensañó" con la víctima, Shila, noruega de 13 años, a la que violó dos veces antes de matarla estrangulándola.

La sentencia considera probado que sobre las siete de la mañana del 2 de abril el condenado abordó a la adolescente, cuando ésta iba desde su casa hacia la parada del autobús escolar. El muchacho la arrastró hasta un descampado. Allí, la desnudó, se colocó un preservativo y la violó vaginalmente. Luego, sin el condón, la violó analmente. El joven venció la resistencia de la menor a golpes y, tras las agresiones sexuales, la mató estrangulándola con las manos. Una hora después del crimen, el adolescente volvió, con su perro, a buscar sin éxito el preservativo. Tras ser arrestado, el joven confesó el asesinato pero sostuvo que cuando violó a su compañera de clase ésta ya estaba muerta, algo que el fallo rechaza.

La juez resalta que el condenado pertenece a una familia económicamente estable, con formación cultural óptima, aunque experimenta "sentimientos de ira y es irritable cuando se le provoca". Los padres de la víctima volvieron a criticar la Ley del Menor. "[La norma] defiende al asesino y no a las víctimas", declaró Farhad Bigdely, padre de la escolar.

El defensor del Menor de la Comunidad de Madrid, Pedro Núñez Morgades, instó ayer al Estado, a las comunidades autónomas, y a los ayuntamientos a reformar la Ley del Menor y su aplicación. A su juicio, la falta de medios y de una "adecuada explicación" de la norma "están generando una sensación de impunidad y una alarma social con las que hay que terminar".